Ayer los larenses fueron sorprendidos con el nuevo precio del pasaje urbano que aumentó de 300 a 500 bolívares, en horario regular, el cual fue aprobado la semana pasada por la Autoridad Metropolitana de Transporte Terrestre (AMTT) luego del incremento de sueldos y salarios. Sin embargo, el servicio está al punto de colapso debido a la escasez de unidades por la falta de repuestos e insumos.
Este lunes, en varias paradas del este de Barquisimeto se pudo observar gran cantidad de usuarios que esperaban durante varios minutos alguna unidad que los llevara hasta su destino.
Los usuarios de líneas como Ruta 5, 12 o 21, esperaban con ansias el paso de alguna unidad, sin éxito.
En conversación telefónica con uno de los directivos de la Ruta 5. el señor Rafael Álvarez, se conoció que al menos entre el 40 y 70% de las unidades presentan alguna falla de mecánica, motor, cauchos, aceite, batería y que por esa razón debe salir de circulación. «Tenemos muchos problemas de insumos y repuestos para las unidades», comentó.
Por su parte, Bernardo Gámez presidente de la Ruta 5 comentó que 110 unidades que tiene su parque automotor, sólo 45 laboran diariamente: 35 para la ruta que cubre Las Trinitarias y el resto para la ruta de La Rosaleda-23 de Enero. Señaló que la paralización se le atribuye principalmente a la falta de cauchos y baterías. » Se hace demasiado difícil trabajar de esa manera», dijo.
La semana pasada el secretario del Sindicato Automotor del estado Lara, Giovanny Perozo señaló que más del 70% de las unidades del parque automotor de la entidad están deterioradas debido a la escasez de repuestos y los altos precios que registran.
El tema del incremento del pasaje también es otro de los puntos que resalta en el sector transporte. Desde ayer las tarifas se incrementaron en al menos un 60%. Los trabajadores del volante exigían el pago de 800 Bs. a 1000 Bs. m pero desde la Alcaldía sólo aprobaron 500 Bs y 600 Bs, los fines de semana, feriados, y después de las 7:00 pm.
Los pasajeros aseguraron que se trata de un golpe al deteriorado bolsillo, que en el último año se ha visto aminorado debido a los altos precios de productos y servicios con una inflación galopante de al menos 700%, y de la cual se espera alcance el 1000% al final de año.
» Yo tengo tres hijos y a todos les doy para el pasaje, y además del mío, se me va más de la mitad del sueldo en eso», señaló una usuaria.
Otros pasajeros, sin embargo, entienden que la crisis del país le ha pegado a todos los venezolanos por igual, y están conscientes que los precios de mantenimiento y repuestos de las unidades es costoso.
Lo cierto del caso, es que mientras el pasaje aumenta, las unidades en servicio disminuyen, y los pasajeros deben esperar largo tiempo para utilizar el servicio, o en algunos casos utilizar otras vías para llegar hasta su destino.