Julio Ribas espera desde hace un mes que el gobierno venezolano le venda 300 dólares para comprar una medicina en el exterior. Pero desde que empezó el trámite, que no sabe cuando terminará, el dólar ya está 38% más caro.
El bolívar se devalúa aceleradamente ante un dólar cada vez más escaso en un economía arrasada por la recesión e inflación y que ya carece de 80% de los alimentos básicos.
Según analistas, la devaluación del 150% en los tres últimos meses responde a una estrategia gubernamental para ajustar la tasa de cambio a la realidad, con un impacto inflacionario.
La escasez de medicinas y alimentos lleva a muchos a buscarlos en otros países pero conseguir las divisas -que monopoliza el gobierno socialista- es un calvario.
«Hice la solicitud hace un mes por 300 dólares para que mi hija los reciba en Panamá. Ella está trabajando allá y los necesito para que me compre una medicina para la tensión», comentó Ribas.
Pero Manuel Guevara, empleado de atención al cliente de una casa de cambios -intermediaria ante el gobierno- le dice que tendrá que esperar al menos dos meses más. Para entonces, nadie sabe cuánto más podrá costar el dolar.
El férreo control de cambios vigente en Venezuela desde 2003 redujo al mínimo el acceso a divisas para personas y empresas, lo que se agrava por el desplome del ingreso petrolero.
En febrero pasado, el presidente Nicolás Maduro lanzó el Dicom (Tipo de Cambio Complementario) a una tasa flotante de 202,94 bolívares por dólar.
Tres meses después, la tasa aumentó hasta 511,62 bolívares por dólar al cierre del jueves.
Esta tasa convive con otra de 10 bolívares por dólar, llamada Dipro y reservada para la importación de materias primas industriales, alimentos y medicinas fuertemente subsidiados.
El gobierno asigna 8% de las divisas para el Dicom y el 92% al Dipro. En el mercado negro, en tanto, cada dólar cuesta algo más de 1.000 bolívares.
El lanzamiento del Dicom incluyó una fuerte devaluación para amplios sectores de la economía, cuyos costos importados pasaron de una tasa de 6,3 o 14 bolívares por dólar, a la de flotación.
Esto impactará el costo de vida de forma significativa, lo que el ministro de Industria y Comercio, Miguel Pérez Abad, reconoce como un «período de ajuste» inflacionario.
Venezuela tiene la inflación más alta del mundo: 180,9% en 2015 y proyectada en 700% por el FMI para 2016.
Mercado artificial
El Dicom ha tomado una tendencia positiva, dijo el economista Luis Vicente León.
Consiste en «desplazarse en una devaluación severa», que permita corregir lo que él considera profundos desequilibrios por la sobrevaluación del bolívar frente al dólar.
Pero hasta ahora el funcionamiento del tipo de cambio es visto como un misterio que no genera confianza hacia el sistema monetario.
La economista Anabella Abadi del Grupo ODH Consultores, indicó que «el mecanismo, como los anteriores, ha sido muy opaco. No hay información sobre cómo se toman las decisiones».
El Dicom se mueve hacia la cotización del mercado negro, que ronda los 1.000 bolívares por dólar. Abadi opina que eso es «beneficioso por el propio juego del mercado. Pero que suba sin explicación clara y que aplique a tan pocas divisas hace que, al día de hoy, sea un sistema marginal».
El acceso a divisas es una de las principales trabas para la actividad productiva, según el gremio de los industriales.
León afirma que «el problema es que en realidad no hay oferta, es un desplazamiento artificial de la moneda por parte del Banco Central, que ha decidido un objetivo de devaluación».
Mientras, el llamado dólar paralelo -al cual el gobierno atribuye ser causante de 70% de la inflación- retrocedió 16% en dos meses a 1.011 bolívares, en medio de expectativas de que a una tasa de 600 bolívares -explica León- pueda haber más oferta oficial de divisas en el Dicom.
«Que cueste uno o cien bolívares no importa porque al final (los dólares del Dicom) no están disponibles», afirmó un cambista consultado por la AFP, que pidió la reserva de su nombre.
El proceso de adquisición en el Dicom es largo y difícil.
Detrás del mostrador de la casa de cambios, Guevara, explicó que quienes aspiran a comprar divisas en este mecanismo deben empezar por registrarse en la web de la empresa para hacer la solicitud y después esperar 30, 60 días «o hasta un año».
En estas operaciones se vende hasta un máximo de 300 dólares diarios.
A mediados de mayo, el ministro Pérez Abad explicaba que la devaluación del Dicom sería para «ajustarse a la realidad económica del país».
Ante la escasez de divisas, algunos empresarios deben adquirirlas en el mercado negro, trasladándose esos costos al consumidor.
«El gobierno está subiendo artificialmente el Dicom para que cuando salga a vender en serio, lo pueda hacer al precio real», sostuvo el cambista.