Nos acercamos al desenlace del terrible drama que vive Venezuela. No me refiero al fraudulento proceso que tendrá lugar el próximo domingo. Lo que sucederá ese día está cantado desde hace tiempo.
Estamos gobernados por una verdadera tiranía. Propios y extraños tenemos la convicción de que la democracia dejó de existir hace rato. No ha sido un hecho casual.
2018 avanza aceleradamente. Nos acercamos a la mitad de un año pleno de expectativas favorables que tenemos la obligación de concretar. Por supuesto que no me refiero a una fraudulenta elección presidencial convocada y por ejecutarse al margen del Derecho y de la más elemental decencia ética y política.
La reciente acción concertada entre Estados Unidos, Inglaterra y Francia para detener la temeraria fabricación de armas químicas mortales en Siria no sorprendió a...