Eran nueve insurgentes y habían sido sentenciados a morir fusilados. Las pocas gentes que se agolparon en la Plaza de Altagracia de Barquisimeto, presenciaron con estupor el estado de aquellas almas en cuyos rostros se dibujaba la muerte.
Gil Fortoul fue criado en la hacienda Hato Arriba, perteneciente a su padre, la cual estaba enclavada en el municipio Barbacoas que para entonces formaba parte del Distrito Tocuyo.
Una correspondencia oficial, con sello de la Presidencia del Gobierno español, cuyo impreso en letras sombreadas en rojo se leía: Carta urgente nacional, alarmó...