Según estudios del Observatorio Venezolano de la Violencia, OVV, en nuestro país los suicidios en la población infantil han ido en alza en los últimos años y solo en el primer semestre del año 2020 se registraron 19 muertes de niños y adolescentes por ese motivo.
A esta premisa se suman los inventarios de la organización defensora de los derechos de la niñez, Cecodap, con su reciente investigación titulada “El suicidio infantil: un problema olvidado en medios de comunicación y políticas públicas de Venezuela”, en el que se aborda el tema de la salud mental en la infancia y adolescencia.
Carlos Trapani, coordinador del Cecodap, señaló que dicho informe presentado a mediados de 2021 lo que busca es dignificar la salud mental como un derecho humano fundamental y sobre todo poder visibilizar el impacto de la emergencia humanitaria compleja por la que atraviesa el país, agravada por la situación producida por la pandemia, en la salud mental de los niños y adolescentes.
En el estudio realizado por la OVV se determinó que que solo entre enero y junio de 2020, 19 niños, niñas y adolescentes perecieron por suicidio. Señala además el informe, que la crisis venezolana se ha hecho angustiosa para muchos y ha llevado a que se incrementen los actos suicidas asociados comúnmente a cuadros en los que se reporta depresión y ansiedad.
“El suicidio en Venezuela, además de ser un problema de salud pública, puede considerarse también como un fenómeno de carácter social (…) la precarización de las condiciones de vida no solo ha incrementado la violencia directa y estructural, sino también la violencia de los individuos hacia ellos mismos”, señala igualmente el informe de la OVV.
Hay que destacar que las políticas públicas empleadas en el país por el sector oficial no han priorizado el tema de la salud mental. “La Constitución venezolana se apega a la definición de la Organización Mundial de la Salud para describir el derecho a la salud mental. El artículo 41 establece que el derecho a la salud y a servicios de salud implica que todos los niños, niñas y adolescentes disfruten del nivel más alto posible de salud física y mental”, indica igualmente en su informe la organización defensora de los derechos de la niñez, Cecodap.