Una redada policial en una favela de Río de Janeiro en Brasil dejó este viernes 11 de febrero al menos ocho muertos, de acuerdo con información suministrada por la policía militar estatal.
La redada en la favela de Vila Cruzeiro fue coordinada por la policía de rutas y la policía militar. Los agentes incautaron armas automáticas, pistolas, granadas y kilos de drogas, según se aprecia en una foto publicada en la cuenta de Twitter de la policía militar.
La prensa local informó que se cerraron una decena de escuelas y varias clínicas de salud. Un cadáver quedó tendido en la calle cubierto por una lona y un grupo de vecinos se reunió a la espera de saber si era un pariente o amigo.
La redada del viernes buscaba a criminales de otra favela, Jacarezinho, según la cuenta policial en Twitter. Jacarezinho es el barrio donde el estado inició su iniciativa llamada “Ciudad integrada”, que busca recuperar territorio controlado por las pandillas. El año pasado fue escenario de una incursión policial que dejó una veintena de muertos.
Semanas atrás, el Tribunal Supremo emitió un fallo que obliga al gobierno estatal a tomar medidas para reducir las matanzas y violaciones de los derechos humanos por parte de la policía, con un plazo de 90 días para presentar un plan.
La corte falló que la fuerza letal sólo se debe emplear cuando se hayan agotado todos los medios y cuando sea necesaria para proteger la vida. La policía tiene plazo de 180 días para instalar artefactos de grabación de audio y video en sus uniformes y vehículos.
