Un total de 24 elementos de los cuerpos de paz de Naciones Unidas y un civil que trabajaba para la ONU fueron asesinados en ataques deliberados durante 2021, de acuerdo con el sindicato de trabajadores de la organización.
Dos de los miembros de los cuerpos de paz que murieron eran mujeres, y por octavo año consecutivo Mali fue el país más peligroso del mundo con 19 elementos de los cuerpos de paz muertos, informó el Comité Permanente para la Seguridad e Independencia del Servicio Civil Internacional. La República Centroafricana fue el segundo en la lista con cuatro muertes de miembros de los cuerpos de paz.
“Una vez más, integrantes del personal de Naciones Unidas, especialmente ‘cascos azules’, que sirven en los lugares más peligrosos del mundo pagaron el precio más alto”, dijo Aitor Arauz, presidente del sindicato del personal de Naciones Unidas, en un comunicado el viernes.
“Nadie fue aprehendido y sentenciado por tales crímenes”, sostuvo. “Solicitamos a los gobiernos que hicieran lo más que pudieran para proteger al personal de Naciones Unidas y enjuiciar a sus asesinos”.
Ocho elementos de los cuerpos de paz que murieron en 2021 eran de Togo, cuatro de Chad, tres de Costa de Marfil, tres de Egipto y uno de Ruanda, Burundi, Congo, Gabón, Malaui y Marruecos, según el sindicato del persona. El único civil asesinado era del Congo.
Los 25 asesinatos en 2021 llevan la cifra total de muertes a al menos 462 miembros del personal de Naciones Unidas y de personal asociado que han muerto en ataques deliberados en los últimos 11 años por medio de dispositivos explosivos caseros, granadas propulsadas con lanzacohetes, artillería, rondas de mortero, minas terrestres, emboscadas, ataques de convoy, atentados suicidas y asesinatos dirigidos, de acuerdo con el sindicato.
La cifra total de muertes del año pasado se compara con los 15 asesinatos de 2020, 28 de 2019, 34 de 2018 y 71 de 2017.
