Corea del Norte ha seguido desarrollando sus programas nucleares y de misiles balísticos, lo que incluye su capacidad de producir materiales nucleares físiles, en una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, según indicaron expertos de la ONU en un nuevo reporte.
El comité de expertos identificó una “aceleración clara” en los ensayos y demostraciones de nuevos misiles de corto y posiblemente medio alcance durante el mes de enero, que “incorporaban tecnologías tanto balísticas como de guiado y utilizaban propulsores sólidos y líquidos”, según el resumen ejecutivo del reporte, al que The Associated Press tuvo acceso el sábado por la noche.
“Entre las nuevas tecnologías probadas había una posible cabeza hipersónica guiada y un vehículo maniobrable de reentrada”, señaló el comité. Corea del Norte también demostró “capacidades aumentadas de despliegue rápido, amplia movilidad (incluso en el mar) y resiliencia mejorada de sus fuerzas de misiles”.
Los expertos dijeron que Corea del Norte “siguió buscando material, tecnología y conocimiento para estos programas en el extranjero, a través de medios cibernéticos e investigación científica conjunta».
El comité dijo hace un año que Pyongyang había modernizado sus armas nucleares y misiles balísticos ignorando las sanciones de la ONU, empleado ciberataques para ayudar a financiar sus proyectos y buscado material y tecnología para su arsenal en países extranjeros como Irán.
“Los ciberataques, especialmente sobre activos en criptomonedas, siguen siendo una importante fuente de ingresos” para el gobierno de Kim Jong Un, según dijeron los expertos que monitorean la implementación de sanciones contra el país.
Pyongyang ha presentado varios sistemas de armas en los últimos meses y amenazado con levantar la moratoria de cuatro años sobre pruebas armamentísticas más serias como explosiones nucleares y lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales. En enero se produjo un récord de nueve lanzamientos de misiles, y se han probado otras armas como un prototipo de misil hipersónico y un misil lanzado desde un submarino.
El Consejo de Seguridad sancionó en un principio a Corea del Norte tras su primer ensayo de explosión nuclear en 2006, y endureció las medidas en respuesta a nuevos ensayos nucleares y a los cada vez más sofisticados programas nucleares y balísticos norcoreanos.
El comité de expertos dijo que el bloqueo de Corea del Norte contra los contagios de COVID-19 ha hecho que se alcancen “niveles históricamente bajos” de entrada y salida de personas y mercancías en el país. El comercio legal e ilegal, incluido el de bienes de lujo, “se ha detenido en gran parte” aunque el tráfico ferroviario transfronterizo se reanudó a principios de enero, indicaron.
El comité había dejado claro antes que Corea del norte sigue pudiendo eludir las sanciones e importar de forma ilícita petróleo refinado, acceder a canales internacionales de banca y realizar “actividades cibernéticas malignas”.
Las sanciones de Naciones Unidas prohíben las exportaciones norcoreanas de carbón, y los expertos señalaron en su nuevo informe que aunque las exportaciones de carbón por mar aumentaron en la segunda mitad de 2021, “mantenían un nivel relativamente bajo”.
“La cantidad de importaciones ilícitas de petróleo refinado aumentó de forma drástica en el mismo periodo, pero a un nivel mucho menor que en años anteriores”, indicó el comité, señalando que las entregas directas de petroleros no norcoreanos había cesado y sólo entregaban petróleo barcos norcoreanos, “un cambio drástico de metodología”, probablemente debido a las medidas contra el COVID-19.
Pyongyang también continúa evitando sanciones marítimas “enturbiando de forma deliberada las redes financieras y de propiedad”.
Aunque la situación humanitaria en el país sigue empeorando, el comité dijo que la falta casi total de información del país hace difícil determinar las “consecuencias humanitarias involuntarias de las sanciones de Naciones Unidas que afectan a la población civil”.