Decenas de miles de personas se manifestaron el domingo en toda España contra las medidas de austeridad que han reducido los gastos de enseñanza y cuidados médicos, mientras el país ha caído en una segunda recesión en tres años.
Con un desempleo superior al 24,4% _el mayor de la eurozona_ y más de la mitad de los jóvenes menores de 25 años en el paro, el gabinete conservador del presidente del gobierno Mariano Rajoy ha adoptado duras medidas de austeridad en los primeros cinco meses de gobierno para evitar que España corra la misma suerte que Grecia, Irlanda y Portugal, salvadas de la bancarrota gracias a los créditos internacionales de contingencia.
En un mitin, Rajoy _que el viernes anunció una nueva serie de aumentos fiscales para el próximo año_, dijo que no tenía «otra alternativa». Agregó que «España no necesita maquillaje, sino profundos cambios estructurales».
Los manifestantes en Madrid, Bilbao, Barcelona y Valencia portaron carteles el domingo en los advertían a Rajoy que «con la sanidad, la educación y los servicios públicos no se juega».
El legislador de Izquierda Unida Cayo Lara dijo en un mitin en Madrid que muchos manifestantes creen que el gobierno intenta utilizar la crisis financiera como excusa para privatizar los servicios públicos esenciales.
Ruth Colomo, una maestra de 39 años, dijo que la enseñanza pública española y el sistema nacional de salud han sido pagados durante décadas con los impuestos de los españoles.
«Son nuestros y creo que tenemos el derecho de pelear por ellos», agregó.
El mecánico Evaristo Villar, de 62 años, dijo esperar que Rajoy escuche a los manifestantes. «El gobierno nos escuchará. Aunque no sé si prestará atención».
Rajoy dijo a los miembros de su partido que, dado el calamitoso estado de la economía nacional que heredó del anterior gobierno socialista en los comicios del 20 de noviembre, «lo menos que podían hacer… es callarse».
