Las actividades académicas se desarrollaban con total normalidad la mañana del lunes en el Liceo Bolivariano Dr. Siso Martínez, de la Ruezga Sur. Un equipo de este rotativo se trasladó a la sede de la institución tras recibir una llamada de un representante que se quejó de la inseguridad que presuntamente reina dentro de plantel y evitó identificarse.
La directiva del plantel se mostró extrañada ante la denuncia y aseguró que la frecuencia de los disturbios ha disminuido durante las últimas semanas. Recordaron que hubo una época en la que debían soportar entre dos y tres conatos de disturbios a la semana.
“Llevamos dos semanas tranquilos”, explicaron. Se conoció que en el último disturbio generado por supuestos alumnos de una institución cercana, la directora encargada fue presuntamente amenazada y ello motivó su renuncia al cargo.
René Sangroni, coordinador del plan preventivo integral en el liceo, detalló que la situación de seguridad ha mejorado gracias a la realización de distintos talleres en conjunto con entes como la Oficina Nacional Antidrogas y el Instituto de Derechos del Niño y el Adolescente (Idena).
“Además tenemos recorridos permanentes de parte de funcionarios de la Guardia Nacional”.
El Siso Martínez es uno de los 25 liceos que han sido abordados de forma prioritaria a través del Plan Preventivo Integral contra la violencia. Dichos planteles, han registrado situaciones críticas en materia de violencia interna y externa, durante los últimos cinco años.
“En este tiempo hemos pasado de una situación crítica a una relativamente buena… la frecuencia se redujo a uno o dos conatos de ataques con piedras, cada 15 o 20 días. En este sector el problema no se refiere a rivalidad entre alumnos, como ocurre entre los liceos de la avenida Libertador; acá el problema es de ‘apoyo’ entre los liceos, que se traduce en disturbios cada vez que hay exámenes finales”.
Sangroni informó que el martes 19 de febrero recibirán la visita de funcionaros de la ONA, quienes dictarán un taller preventivo durante toda la mañana. “Además contamos con la ayuda permanente de una defensoría educativa que se encarga de brindar apoyo para atacar el problema multifactorial de la violencia”.
Una de las medidas ejecutadas fue el traslado de los alumnos de educación diversificada al horario de la tarde, con lo cual lograron disminuir la violencia en un 65%. Sin embargo, la propuesta será cambiar los estudiantes de básica para la tarde (1ero a 3er año), a fin de probar una nueva estrategia que persigue mitigar por completo la situación.
Problemas de infraestructura
Gracias a los recursos recibidos de parte de Corpolara lograron levantar una nueva pared en la parte posterior del liceo, luego de que fue abierto un boquete por parte de supuestos alumnos.
Sin embargo, en materia de infraestructura esperan la ayuda de cualquier organismo para arreglar la cerca principal y tapar un hueco en el techo de uno de los laboratorios.