Más de 10 instituciones académicas del estado Lara están enfrentando un brote de COVID-19 tras el inicio de las clases presenciales en Venezuela. Así lo informó Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores en Lara a Elimpulso.com.
El profesor hizo un llamado a las autoridades para que investiguen estos casos y tomen cartas en el asunto rápidamente, para evitar que se sigan multiplicando los casos positivos de coronavirus en las escuelas del estado Lara.
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«El llamado es a que se investigue, se desinfecte y que todas las personas se vacunen contra la COVID-19«, precisó.
Arroyo recalcó que la intención de los docentes venezolanos es volver a las clases presenciales, ya que considera que el periodo a distancia fue «un total fracaso«. Sin embargo, aseveró que para que esto sea posible es necesario que las instituciones del país tengan las condiciones mínimas para hacerle frente a la COVID-19.
Cuando habla de «condiciones mínimas», Arroyo se refiere al servicio de agua, un tema que carece en la mayoría de las escuelas de Lara. «Más del 90% de las instituciones académicas de Lara no tienen agua«, precisó Arroyo. Por ende, recordó que sin el vital líquido, todas las personas que frecuenten a las escuelas estarán expuestos al virus.
«No dotan de tapabocas a los alumnos o profesores, no hay desinfectante ni servicios (…) no hay condiciones mínimas«, acotó.
Entre las instituciones afectadas, el profesor Arroyo mencionó las siguientes: Rafael Monasterios, Juan Guillermo Iribarren, Tomás Rafael Jiménez, Pablo Manzano Veloz y Andrés Bello, en el municipio Iribarren. Mientras que en Palavecino sería la institución Francisco De Paula Briceño. Asimismo, comentó que en Morán, específicamente en El Tocuyo, la institución María Consuelo Uzcátegui y el pre-escolar La Manga.
Por ende, Arroyo aprovechó para hacerle un llamado a las autoridades de las instituciones afectadas para que cuenten la verdad de lo que está sucediendo, ya que ocultar los brotes de COVID-19 significa que más personas puedan seguir contagiándose.