El Fondo Monetario Internacional (FMI) saludó este jueves la devualación de la moneda en Venezuela, como un intento positivo por reducir los desequilibrios macroeconómicos, pero instó a Caracas a continuar eliminando las distorsiones cambiarias.
«Saludamos las medidas anunciadas por las autoridades venezolanas (…) que pueden ayudar a reducir los desbalances macroeconómicos», señaló el portavoz de la entidad, Gerry Rice, en rueda de prensa.
La devaluación del bolívar, de 4,30 a 6,30 unidades por dólar (de casi 32%), entró en vigor el miércoles, como una medida del gobierno para aliviar el déficit fiscal (16% del PIB), puesto que el Estado contará con más bolívares por las ventas de crudo por las que obtiene el 96% de las divisas que recibe.
Desde 2003 rige en Venezuela un férreo control de cambios establecidopor el gobierno de Hugo Chávez, en un intento por frenar la fuga de capitales, y desde entonces la moneda ha sido devaluada cinco veces por el Ejecutivo.
«Creemos que se puede hacer más y alentamos a las autoridades a continuar con sus esfuerzos en remover todas las distorsiones del sistema de cambio», dijo Rice.
El FMI espera que Venezuela, cuyo presidente se encuentra hospitalizado en Cuba desde diciembre aquejado de una recaída del cáncer, «tome más acciones para recudir las vulnerabilidades económicas, mejorar el clima de negocios» y alcanzar un crecimiento económico sostenible, agregó.