«The Crown» y “The Queen’s Gambit” de Netflix se combinaron con “Ted Lasso” de Apple TV+ para ganar los principales premios Emmy el domingo, una novedad para los servicios de streaming que consolidó su ascenso a la prominencia en la industria televisiva.
Los astros de “The Crown” Olivia Colman y Josh O’Connor se alzaron con los premios a mejor actriz y actor de drama, mientras que Jason Sudeikis, protagonista de la afable “Ted Lasso”, y Jean Smart, estrella de la historia sobre la brecha generacional “Hacks”, triunfaron como actores de comedia.
Colman y O’Connor hicieron de madre e hijo en la pantalla, ella como la reina Isabel II y él como el príncipe Carlos, en la saga sobre la familia real británica.
“Habría apostado dinero a que esto no iba suceder”, dijo Colman sobre su premio, que calificó como “un final encantador para el viaje más extraordinario” con el elenco y los creadores del programa. Mantuvo breve su discurso, y con la voz entrecortada explicó por qué estaba llorando.
Más temprano en la velada, la exuberante compañera de elenco de “Ted Lasso” Hannah Waddingham, ganadora del premio a la mejor actriz de reparto en una serie de comedia, dijo que Sudeikis “cambió mi vida con esto, y más importante aún, la de mi bebé”.
Brett Goldstein de “Ted Lasso”, quien ganó el premio al mejor actor de reparto en una serie de comedia, dijo que había prometido no decir palabrotas, pero hizo la mímica o fue silenciado durante unos segundos antes de calificar el programa como el “privilegio y placer” de su vida.
Gillian Anderson y Tobias Menzies, del drama real británico “The Crown”, fueron honrados por sus papeles de reparto. La serie también obtuvo honores a guion y dirección.
Kate Winslet, quien interpretó al personaje principal en “Mare of Easttown”, y Ewan McGregor, quien protagonizó la serie biográfica sobre el diseñador de modas “Halston”, fueron reconocidos como los mejores actores en una serie limitada.
Julianne Nicholson y Evan Peters obtuvieron honores por sus actuaciones de reparto en “Mare of Easttown”, una serie sobre crimen y disfunción familiar.
Unas 500 personas asistieron a los Emmy en el centro de Los Ángeles. En la alfombra roja, Billy Porter se destacó con un traje negro con grandes alas y Sudeikis caminó con uno de terciopelo azul claro.
El objetivo de los productores era presentar una gala optimista en la que se reconociera lo mucho que aumentó la importancia de la televisión durante los confinamientos por la pandemia.