La dictadura de Nicolás Maduro está condenando a muerte a los presos políticos, al negarles el derecho a la atención médica, alertó el director de despacho de la Presidencia Encargada, Luis Somaza, al fijar posición en torno a gravísimo problema que pone en riesgo de vida de los detenidos.
“Es inadmisible que una persona que no ha cometido ningún delito padezca una crisis que pone en riesgo su vida y aún así se le niegue la atención médica”, precisó Somaza en un mensaje divulgado a través de sus redes sociales.
El dirigente político exigió que Roland Carreño sea trasladado a un centro médico de inmediato, debido a su crítica condición de salud, denunciada por sus familiares.
Sin embargo, así como Carreño, son cientos los presos políticos que se encuentran con condiciones de salud comprometida ante las precarias condiciones de los calabozo del régimen y la negativa de que reciban atención médica, como es el caso de Javier Tarazona, director de FundaREDES.
La salud de Tarazona se encuentra comprometida debido a su condición de diabetes e hipertensión. No obstante, la dictadura no permita que reciba los cuidados necesarios para salvaguardar su vida.
Ante esta grave situación, el embajador de los Estados Unidos ante Venezuela, James Story, exigió que Javier Tarazona, reciba atención médica inmediata, antes de que sea tarde.
“Hace días, el preso político Gabriel Medina murió luego de un mes agonizando sin atención”, recordó Story en un mensaje divulgado a través de sus redes sociales.