Su denuncia y condena ante la Comisión Delegada, de los hechos ocurridos en Campearito estado Sucre, donde un grupo de delincuentes someten, humillan y golpean a un soldado de la Guardia Nacional, porque supuestamente efectivos de ese componente militar y de la Fuerza Armada agreden constantemente a la población de esa región oriental del país, planteo el diputado de la Asamblea Nacional legítima por el estado Mérida, Williams Dávila. .
El legislador merideño en la reunión de la Delegada celebrada este martes vía online, solicitó un punto de información para tratar este acontecimiento en el estado Sucre, que fue difundido por los propios delincuentes en un video a través de las redes sociales.
Exhortó a los efectivos de la Fuerza Armada venezolana a tomar conciencia sobre estos hechos, de la necesidad de rescatar la dignidad de la presidencia de la República, que es el comandante en jefe de la Fuerza Armada.
“La vía para rescatar las instituciones, el estado de derecho y la dignidad de la FAN es precisamente lograr elecciones presidenciales y parlamentarias, de lo contrario, el pueblo les tendrá miedo, pero nunca respeto. No pierdan la gloria legada por nuestros padres libertadores. Ahora más que nunca necesitamos una Fuerza Armada institucional al servicio de la República y no de un grupo político, ni ideológico y mucho menos al servicio de grupos vinculados al hampa y el narcotráfico, como está sucediendo hoy en Venezuela”, afirmó el diputado Dávila.
Manifestó el parlamentario que estos hechos evidencia que en el país no existe Estado de Derecho y que las Fuerza Armada venezolana ha perdido el respeto del pueblo venezolano. No justifica la agresión contra el Sargento Luis Planche, por parte de este grupo hamponil, que toma la justicia por su propia mano, supuestamente para defender a los pobladores inocentes de Campearito, quienes al parecer son agredidos constantemente por los efectivos de la Guardia Nacional asignados a ese sector.
“Cómo es posible que todavía los militares venezolanos se presten a esta indignidad por culpa de sus propios jefes. No hay estado de derecho, el país está a la deriva a merced del hampa. La agresión contra la gente común trae como consecuencia estas acciones de grupos al margen de la ley, que utilizan un argumento lógico en defensa de la gente inocente de su pueblo”., explicó Dávila
Calificó de muy grave esta situación y la comparó con Pablo Escobar en Colombia, recordando que hasta un pueblo compró, era dueño de un equipo de futbol, pero un peligroso narcotraficante, que tenía en zozobra todo un país.
“Este grupo hamponil fuertemente armado increpa a este sargento Planche, lo golpean, lo someten y vejan, por la violencia en contra de los habitantes de Campearito, ejercida por sus compañeros de armas”, puntualizó el parlamentario merideño.
