Decenas de personas desesperadas por padecer los embates de vivir durante los últimos ocho meses sin suministro por tubería de agua potable, decidieron salir a manifestar.
Desde tempranas horas de este martes lo hicieron en plena avenida principal de San Lorenzo, al norte de la ciudad, y más tarde, alrededor de las 10:00, optaron por instalar la protesta en ambos sentidos de la avenida Circunvalación.
El caos no se hizo esperar, la atención fue convocada casi de inmediato.
“No es posible que tengamos ocho meses sin agua potable, nuestros grifos están secos y lo que hace Hidrolara es burlarse de nosotros. Estamos cansados, necesitamos saber qué pasa”, dijo Olga Peroza, habitante de Colinas de San Lorenzo, comunidad afectada.
Son al menos 80 familias que presentan una situación crítica con respecto a la disponibilidad del vital líquido para sus labores habituales. “Casi a diario nos vemos obligados a pedir ayuda de vecinos tanto para lavar ropa como para bañarnos”, agregó Yusbeli Perozo.
Los manifestantes cerraron ambos sentidos de la avenida Circunvalación con cauchos viejos y troncos de árboles que amenazaban con quemar.
Y fue tan definitiva la decisión de generar un caos vehicular para hacer sentir su disgusto para con la hidrológica regional, que hasta piedras lanzaban a los carros que por su condición de rústicos pasaban por encima de los obstáculos.
“Cuando Hidrolara hace una maniobra con las llaves, nos da agua pero afecta a otras comunidades. Pero eso tampoco lo queremos, necesitamos es un suministro continuo para vivir bien”.
Se cansaron también de recibir “pañitos de agua tibia” como camiones cisterna, los cuales no se justifican teniendo una red de tuberías a través de las cuales debería llegar el servicio que pagan religiosamente mes a mes.
Finalmente reconocieron que cuadrillas técnicas de Hidrolara han visitado en diferentes ocasiones la referida comunidad, pero aparentemente no han dado con el problema.
Lo grave del asunto es que conforme pasa el tiempo es mayor la cantidad de familias que ven suspendido el suministro de agua potable.
Fotos: Ricardo Marapacuto