La ONG Una ventana a la Libertad alertó en su más reciente informe que entre octubre de 2020 y abril 2021 fallecieron al menos 32 privados de libertad en el sistema penitenciario venezolano.
El escrito precisó que 3 privados de libertad con VIH, 24 con tuberculosis, 3 con complicaciones respiratorias, 1 con una afección gastrointestinal y 1 con un infarto.
El monitoreo se realizó sobre un total de 111 Centros de Detención Preventiva, de los cuales 96 están orientados a población civil y los otros 15 al sector militar.
Igualmente alertó que estos centros tienen una capacidad de albergar a 3.702 privados de libertad sin embargo para el mes de abril de 2021 mantienen una población de 11.527 detenidos, de los cuales 10.393 son hombres y 1.134 mujeres. Para un hacinamiento de 311%.
La organización aseguró que los centros monitoreados triplican su capacidad, con el agravante de que ninguno cuenta con comedor o espacios para que los privados de libertad puedan consumir sus alimentos.
De igual forma precisaron que 70 (63%) de estos centros no poseen baños, para que los privados de libertad puedan realizar sus necesidades fisiológicas y puedan asearse.
Asimismo, detallaron que sólo 18 (16%) de los centros cuentan con agua potable, para el consumo personal y aseo de los privados de libertad.