Con las medidas de seguridad necesarias y vestidos de morado, los feligreses lograron pagar sus promesas al Nazareno de San Pablo, de una manera diferente, cuando la imagen del mesías recorrió en una unidad móvil especial para esta Semana Santa.
Otros, vivieron el momento desde sus balcones, ventanas y azoteas, manifestando su fe a través del llanto pero con la ferviente devoción intacta, más aún en esta época de pandemia cuando todos necesitan la cercanía a Dios.
Los feligreses, que por segundo año consecutivo veneran a Jesús El Nazareno desde sus hogares, se arrodillaron al ver la imagen de Jesús con la cruz en el hombro, para orar por la salud y la sanación del mundo entero ante los efectos que ha provocado la pandemia del Covid-19.
El Nazareno salió de la Basílica de Santa Teresa como es tradición para iniciar su recorrido en el papa móvil escoltado por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana
La imagen del Nazareno inició su recorrido por el oeste de Caracas, en Catia, donde los habitantes del sector, uno de los más afectados por el Covid-19, salieron para pedir salud para Venezuela.
“Tengo amigos y familiares enfermos con Covid-19, así que le pido al Nazareno que los sane y le dé mucha salud a Venezuela. A todos aquellos que están en un hospital, que les dé consuelo a ellos y a su familia”, declaró una mujer para el medio TVV Noticias.
En el recorrido, el Nazareno también pasó por las afueras del Hospital José Gregorio Hernández, donde el personal de salud salió de la instalación para verlo. En ese momento, el padre Armelín de Sousa hizo una bendición a los trabajadores del sector para que el Nazareno los ayude en la batalla que luchan contra el Covid-19 en el país, reseñó El Nacional.
