Luzmila Leal, médico internista y directora ejecutiva de Médicos Unidos Venezuela capítulo Lara calificó al Hospital Central Universitario Antonio María Pineda (HCUAMP) de Barquisimeto como una referencia para la formación de médicos muy importantes y preparados del país.
Sin embargo, comentó que con el pasar de los años ha notado cómo este centro asistencial se deteriora poco a poco. Lo cual aseguró le genera tristeza porque los trabajadores de la salud sienten afinidad por este hospital, así que «les duele» verlo en malas condiciones.
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«Es una necesidad que el hospital tenga dolientes (…) y los dolientes somos los trabajadores del sector salud«, indicó.
Leal contó a Elimpulso.com que notan como preocupación que todos los trabajadores del hospital, desde el portero hasta los médicos ubicados en los últimos laboratorios, están trabajando sin las medidas mínimas de bioseguridad por la pandemia de la COVID-19. «Esto nos ha llevado un alto costo de vidas, de esas personas que dieron todo por salvar a la población«, señaló.
Resaltó que las manifestaciones constantes que hacen los trabajadores de la salud no son un tema político, sino un hecho social por las necesidades que estas personas tienen.
Por otra parte, contó que así como los profesionales de la salud no tienen recursos para trabajar, el HCUAMP tampoco cuenta con los recursos mínimos para atender a cientos de pacientes. Mencionó que esto se evidencia cuando un paciente llega, lo atienden y le mandan una larga lista de medicamentos que deben comprar para atenderlo, ya que en el hospital no hay.
La directora de Médicos Unidos Venezuela capítulo Lara mencionó que «es como condenar a la muerte a un paciente» cuando son referidos al HCUAMP porque hay emergencias que no tienen cómo ser solventadas en la inmediatez requerida del asunto. «No tener áreas específicas para salvar la vida de ese paciente es como condenarlo a la muerte«, señaló.
Resaltó que no hay derecho para estas irregularidades porque en la Constitución de Venezuela, específicamente en el artículo 83 y 84, se hace referencia a que el Estado debe equipar absolutamente a todos los hospitales del país. «En cualquier rincón que esté un venezolano debe haber todo lo necesario, porque entonces se está condonando a la muerte, y no nosotros«, aseveró.