A través de un documento, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) publicó algunas sugerencias para la vivencia del tiempo de Semana Santa, a propósito de la pandemia de la COVID-19 en el país.
En la misiva recomiendan tener en cuenta las directrices que se emanaron el pasado año 2020, «adaptándolas a las nuevas situaciones actuales«.
«Recomendamos tener en cuenta las directrices que se emanaron el pasado año 2020, adaptándolas a las nuevas situaciones actuales. Asimismo, tener en cuenta las recomendaciones que la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos nos han hecho llegar acerca de la Semana Santa», dice parte del documento.
También recordaron que las directrices las emite cada Diócesis de acuerdo a la cultura religiosa del lugar y señalaron que en cada parroquia lugares de culto mantienen equipos de bioseguridad.
«Las normas y directrices las emite cada Diócesis de acuerdo a la cultura religiosa del lugar y para la adecuada celebración de los misterios de la Pasión, muerte y Resurrección del Señor. En la mayoría de las Diócesis con sus parroquias y lugares de culto mantienen equipos de bioseguridad y existen equipos de laicos entrenados para cooperar en este campo. Es recomendable en algunos sitios reforzar estos equipos», expresaron.
A continuación, las sugerencias para el tiempo de Semana Santa:
1.Recomendamos tener en cuenta las directrices que se emanaron el pasado año 2020, adaptándolas a las nuevas situaciones actuales. Asimismo, tener en cuenta las recomendaciones que la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos nos han hecho llegar acerca de la Semana Santa.
2. Es importante reafirmar que las normas de tipo litúrgico y pastoral, orientadas a una adecuada celebración y participación de los fieles en los misterios sagrados son de competencia exclusiva de los Obispos en comunión con sus presbiterios diocesanos. Las autoridades civiles deben mantener el orden, el respeto ciudadano y las normas de bio-protección en las calles, las comunidades y los sectores aledaños a los templos durante los días Santos.
3. Las normas y directrices las emite cada Diócesis de acuerdo a la cultura religiosa del lugar y para la adecuada celebración de los misterios de la Pasión, muerte y Resurrección del Señor. En la mayoría de las Diócesis con sus parroquias y lugares de culto mantienen equipos de bioseguridad y existen equipos de laicos entrenados para cooperar en este campo. Es recomendable en algunos sitios reforzar estos equipos.
4. Es conveniente y oportuno que podamos compartir las directrices de cada diócesis para enriquecernos mutuamente y así mostrar que estamos en comunión de esfuerzos y dando la respuesta desde una perspectiva también pastoral. A través del SPEV podemos hacer llegar las diversas directrices diocesanas, para enviarlas a todos los hermanos Obispos. Esto nos permitirá mostrar que estamos en comunión de esfuerzos en la tarea común.
5. Las Diócesis y las parroquias son las que deben mantener el contacto con las autoridades regionales y municipales que estén en el propio territorio.
«Nos ponemos en las manos de Dios para que, con su fortaleza, podamos conmemorar dignamente la Pascua del Señor Jesús» concluye el documento.
