Yeisson Delgado, a los 36 años, curtido en lides ciclistas durante un par de lustros, en la etapa final abrazó aires de gloria y pidió, con justicia, su espacio en la galería de campeones al ser vencedor de la 48 edición de la Vuelta al Táchira.
El nuevo campeón, oriundo de la ciudad de San Antonio del Táchira –cuna de Robinson Merchán- en la jornada de cierre del giro tachirense estuvo “de paseo” al lado de sus principales combatientes, José Chacón, Carlos Galviz y Manuel Medina, entre otros, así como también de sus principales escuderos, alineados todos en el Kino Táchira, divisa que lo respaldó en las diez jornadas de dura brega y que en muestras de su gran preparación, fue el único que concluyó con todas sus piezas bajo la batuta del técnico Aldrin Salamanca, vencedor en la Vuelta del Táchira del año 1999.
Todos ellos, recios en la lucha de los días anteriores dieron licencia a un sexteto de desconocidos, entre ellos dos italianos y un colombiano, quienes alcanzaron diferencia superior a los seis minutos para definir posiciones en el óvalo de Pueblo Nuevo, pleno en sus graderíos, siendo el ítalo Cristiano Monguzzi quien se quedó con la victoria con tiempo de dos horas, 41 minutos y 15 segundos en los 107 kilómetros de brega hacia el sur de la ciudad de San Cristóbal.
El nuevo campeón, en las jornadas de gruesa montaña fue capaz de aguantar los embates de grandes rivales, como Manuel Medina, a quien el técnico Salamanca definió como un ciclista “fuera de serie”. Medina, además de los dos triunfos en la montaña –Cerro El Cristo y Casa El Padre- se quedó con el título de la montaña.
Antes, en las primeras porciones libradas en la planicie, Delgado no dio asomo de sus condiciones. Trasegó kilómetros agazapado en el lote entre los trepadores con dotes de regularidad para no ceder tiempo, hasta que en su ciudad natal, en la séptima porción fue el vencedor y quedó a la espera del golpe final, que ejecutó al día siguiente en Capacho-Cerro El Cristo cuando tomó el liderato.
Carlos Galviz también mostró atravesar por un buen momento en su carrera. Finalizó tercero en la general y acusó el no contar con un colectivo que le permitiera aguantar los escuadrones del Kino y Lotería del Táchira, demoledores en su accionar a diario, hasta conseguir media docena de triunfos en las diez porciones pautadas.
Delgado, en sus emotivas palabras finales coincidió con muchos especialistas en reclamar la presencia de más y mejores rivales en reconocimiento que Colombia en esta oportunidad no vino en plenitud de condiciones para hacerle frente a una prueba con grandes trazados de montaña.
Suple en el trono Yeisson Delgado al también lotero Yimmy Briceño, vencedor de la edición anterior y presente en la de este año, pero refundido en posiciones intermedias.
Foto: Cortesía Lotería del Táchira
