La estrella de Machuelo de Ponce-Puerto Rico, Héctor Lavoe, atinó cuando al son del timbalero cantó: “entren que caben cien, cincuenta parados y cincuenta de pie”.
La trova alude al sistema de transporte de Barquisimeto: servicio básico cuya dinámica de atención al ciudadano, sigue en la lista de asuntos en mora; es tarea a medio terminar.
Atención a dos testimonios.
Ruth Mercedes Monasterios (43), vive en la urbanización Fundalara (este): “De lunes a sábado debo dirigirme hacia el sector Macías Mujica, pues doy clases a niños de primer grado en un colegio que está cerca de la Circunvalación Norte. Para la zona sólo van el ruta 3 y 8, y rapiditos. Salir 15 minutos tarde, es una tragedia porque hay pocas unidades de transporte que va hacia el sector y los rapiditos después de las 7:30 a.m. van full”.
Ariel Mendoza (31), residente de Caribito II (oeste): “Trabajo por Yacural, ubicado muy cerca de Santa Rosa. Trabajo martes, viernes y sábado. Es difícil llegar al lugar porque debo agarrar varios carros para marcar a la hora. A las 6:00 de la mañana salgo y agarro un ruta que llegue hasta el centro y después me monto en un ruta 4 o Santa Lucía, que va por la carretera vieja a Yaritagua”.
El Sindicato Automotor de Lara, tiene contabilizada 2.500 unidades que cumplen con rutas urbanas y la Autoridad Metropolitana de Transporte Terrestre tabula un registro de más de 1.500 rapiditos con servicio en los cuatro puntos cardinales de la ciudad.
Se suma al conteo los mototaxistas y las 20 unidades Yutong entregadas por la alcaldía de Iribarren en noviembre del 2012. A propósito, el reconocido arquitecto y urbanista Ángel García planteó dos ideas y un precedente.
En primera instancia, definió el sistema de transporte de la ciudad como un caos sin filosofía y, subrayó la teoría y planificación, como elementos fundamentales para garantizar un servicio eficiente.
Encuesta de origen y destino
Es planificar los servicios públicos y ejecución de obras, pisando fuerte el presente y garantizando el buen funcionamiento en el futuro. Levantar una ciudad sustentable es combinar la experiencia con la teoría.
El experto en urbanismo, en 15 minutos de entrevista dio cátedra de cómo se plantea un sistema de transporte; lección Nº 1: es preciso aplicar encuestas de origen y destino, ¿propósito?, conocer cómo está distribuida la población y cuáles son los destinos más concurridos para fijar rutas de servicio del transporte urbano.
“Que yo conozca, en los últimos 30 años, en Barquisimeto no se planificó el sistema de transporte como debe ser. Hay una base científica que respalda la organización del servicio.
Hace 30 años, cuando se estaba proyectando el Metro de Caracas, trabajé como coordinador general del grupo logístico que aplicó la encuesta de origen y destino, para ese entonces hubo una movilización muy grande para determinar y entender cómo se movía la gente, cuáles eran los lugares de recreación y zonas de trabajo. Y de esta manera precisar la ruta del Metro”.
En detalle, el experto se refiere a un programa de censos donde la población aporta datos importantes para proyectar las rutas de viaje de unidades de 24 ó 32 puestos que cumplen con rutas urbanas o sistemas exclusivos de sistema de transporte masivo.
Además, se obtiene información de la cantidad de vehículos particulares que transitan por una zona en particular a fin de prever embotellamientos en vías principales.
En virtud de prediseñar la red de paradas a lo largo y ancho de un municipio, la ejecución de la encuesta de origen y destinos, también se justifica.
Un foro para definir criterios
Para García, ideas que no estén respaldadas por un censo de origen, son sólo suposiciones.
A saber, la Autoridad Metropolitana de Transporte Terrestre (AMTT), plantea el mapa de rutas tomando en cuenta trayectos sugeridos por los dueños de líneas, que integran el Sindicato Automotor de Lara. Ahora bien, ¿bajo qué fundamentos establecen las rutas?
“Los transportistas tienen la experiencia. Ellos saben por dónde se moviliza la mayor cantidad de personas en Iribarren, por lo tanto saben qué zona conviene más transitar para el embarque de usuarios.
Pero los técnicos, las autoridades municipales son quienes deben aplicar las teorías, y que han sido aplicadas con éxito en las grandes metrópolis; deben poner orden. La mezcla de la experiencia con la teoría, podría resultar. No obstante, en el centro de nuestra ciudad transitan hasta 18 líneas urbanas, específicamente por la carrera 18 y 22, cuyas dimensiones no son favorables”, declaró García.
La premisa supone el replanteamiento de ideas para hacerle frente a la situación. El entrevistado aseguró que hace 35 años, cuando recién definía lugar de hospedaje en la ciudad, participó en un foro abierto que se llevó a cabo en la Biblioteca Pío Tamayo.
“Se presentaron buenas ideas para construir la ciudad que todos queremos, sin embargo, es mucha el agua que ha atravesado nuestros puentes y nada que disfrutamos de cambios contundentes”.
En tanto, el sistema de transporte de la ciudad es limitado. Pese al servicio de la unidades Yutong de la alcaldía de Iribarren, Línea 1 de 8 kilómetros de Transbarca y sus 8 unidades de alimentación que recorren la Av. 20, los esfuerzos de Metrobús-Lara para reposicionarse como una empresa de servicio y la puesta en marcha de la Ruta Estudiantil, de la actividad de carritos por puesto y mototaxistas, además de las líneas adscritas al Sindicato Automotor, la movilización de 1 millón 210 mil habitantes es una labor de coordinación, que no prende el debate entre autoridades del municipio.
Para 1990 en Iribarren residían 783 mil personas, para la fecha la cifra supera el millón. Hay tiempo para construir una ciudad que se disfrute desde sus calles, con un sistema de transporte confiable; ojalá pese el testimonio de Ruth Monasterios y Ariel Mendoza, son ciudadanía… son pueblo.
¿ Cómo funciona?
Valencia
Adolfo Giménez, presidente del Sindicato Automotor: “En la ciudad el servicio de rapiditos es muy solicitado. Unos 3.500 choferes salen todos los días a atender a la población, mientras que el sistema de transporte masivo todavía es un proyecto que está pendiente, no tenemos un metro que traslade a la ciudadanía.
Las unidades de transporte urbano llevan a los usuarios a zonas céntricas”.
Ciudad Bolívar
Carlos López, presidente del Sindicato Automotor: “Aquí vivimos en un caos. Las rutas de las líneas urbanas las hemos fijado nosotros, después de determinar los lugares de concentración de la gente, pero los rapiditos se han propuesto las mismas zonas”.
San Cristóbal
Germán Corredor, presidente del Sindicato Automotor: “Hemos logrado entendernos con las autoridades, y las rutas de las líneas urbanas no chocan con las unidades que entregó el Gobierno. En los últimos cinco años, el servicio ha mejorado a favor de la población”.
Mérida
José Luis Castañeda, presidente del Sindicato Automotor: “La verdad es que el Trolmérida es como una ruta turística, y nosotros los transportistas seguimos llevando a la gente a las zonas más concurridas.
Desde hace varios años no nos han dado créditos para renovar la flota y los usuarios expresan sus quejas, pero esta situación escapa de nuestras manos”.
Caracas
José Medina, presidente del Sindicato Automotor: “Sólo hay que imaginar la cantidad de personas que viven en esta ciudad para imaginar la situación. El metro de Caracas beneficia a muchas personas, que incluso tienen carros particulares pero las colas en Caracas son terribles y prefieren usar este sistema de transporte”.
Maracaibo
Alí Peñuela, presidente del Sindicato Automotor: “Por acá todavía estamos esperando la tarjeta inteligente para los estudiantes. Este siempre será un municipio opositor y las autoridades pasan factura por eso.
Digamos que hay un equilibrio entre el servicio del metro y las unidades urbanas”.
Sistema de asignación de rutas por la AMTT
El secretario del Sindicato Automotor, Giovanny Peroza, explicó los pasos que cumple la asociación para que la Autoridad Metropolitana de Transporte y Tránsito apruebe una ruta sugerida.
“La última propuesta de trayecto que se hizo fue la Ruta 16. Después de la división de la cooperativa San Remo, surgió esta ruta”, dijo en primera instancia.
Paso a paso:
1. Se elabora un proyecto justificando el trayecto determinado.
2. Se gestiona una carta aval con los consejos comunales cuya cobertura incluya el trayecto determinado.
3. Presentación del proyecto a la AMTT.
4. Autoridades evalúan la factibilidad de la ruta.
5. Anuncian la aprobación o no de la propuesta.
“En Barquisimeto, no hay proyecto de transporte definido. A consecuencia tenemos un sistema que no es efectivo; nosotros movilizamos al 85% de la población, es un número bastante significativo. Debería haber un plan y darlo a conocer a los transportistas, pero también a la ciudadanía. Nosotros sugerimos las rutas, pero quienes determinan si es factible es la AMTT”, agregó.
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