Especialistas alertan que los altos niveles de sedentarismo durante el confinamiento elevan el riesgo de padecer trombosis venosa, por lo que recomiendan apartar un espacio en la agenda diaria para hacer ejercicio
El cardiólogo y presidente de la Sociedad Venezolana de Cardiología, José Miguel Torres Viera, alertó que durante la cuarentena por la pandemia de COVID-19, aumenta el riesgo en la población de padecer afecciones como la trombosis venosa profunda, esto por la falta de actividad física durante el confinamiento.
A propósito de la celebración del Día Mundial del Corazón este martes 29 de septiembre, promovida por la Sociedad Venezolana de Cardiología y Laboratorios Farma, el médico hace un llamado a la población a prevenir esta enfermedad creando el hábito del ejercicio físico diario.
De acuerdo con el especialista, la falta de actividad física evita que haya una circulación sanguínea uniforme en el organismo, mantenerse sentado o con las piernas cruzadas por tiempo prolongado sobrecarga el sistema venoso; por lo que Torres Viera recomienda elevar y extender las piernas y flexionar los tobillos 10 veces cada 30 minutos para disminuir los riesgos de coagulación en la sangre.
La trombosis venosa profunda (TVP) es una enfermedad que se produce cuando se forma un coágulo de sangre -o trombo- en una o más venas profundas del cuerpo. Esta obstrucción del flujo sanguíneo puede ocasionar dolor e hinchazón, pero a veces no desarrolla síntomas.
La sangre tiene un proceso de circulación por las arterias que va desde el corazón hasta los pies. Desde los pies, la sangre regresa por las venas hacia el corazón y luego hasta los pulmones para oxigenarse. Cuando no existe este retorno en la sangre, esta se solidifica y se forman coágulos que dificultan la libre circulación del torrente sanguíneo, explicó el especialista.
La Sociedad Venezolana de Cardiología establece que 20% de las personas mayores a 40 años tienen posibilidad de sufrir de trombosis venosa profunda. Para las personas de 80 años en adelante, la probabilidad disminuye a 8%.
Los síntomas más comunes de la TVP son dolor e hinchazón en brazos y piernas, dolor torácico y dificultad respiratoria.
Torres Viera alerta que cuando hay dolor torácico es porque probablemente ya se produjo en el organismo de la persona una embolia pulmonar; esto ocurre cuando el coágulo se rompe y se desliga de la pared de la vena donde se formó, llega a las arterias pulmonares y automáticamente se entorpece el paso del oxígeno que debe llegar al corazón. De allí la importancia de prevenir la afección y diagnosticarla a tiempo.
Lea más en www.correodelcaroni.com