Ante el aumento en las últimas horas de muertes de parturientas en el Hospital General Dr. Pastor Oropeza Riera de Carora, tres damas en esta semana, se conoció extraoficialmente de una reunión la mañana de este viernes con autoridades sanitarias nacionales, regionales y municipales a objeto de tomar las correspondientes medidas para disminuir estos fallecimientos en el área de obstetricia en dicho centro asistencial.
Una de las muertes ocurrió esta semana y conmovió a la colectividad caroreña. Se trató de una joven a quien presuntamente personal del referido hospital que la atendía la habría obligado a parir cuando requería una cesárea. Su bebé se salvó, pero quedó huérfano de madre.
Este hecho sería el que quizás movió a las autoridades para tomar la decisión de reunirse, ante la honda repercusión que causó en el sentimiento de los torrenses, toda vez que los médicos pudieron haberle evitado la muerte a la joven mujer de 35 años.
De acuerdo con personas allegadas a su familia, a ella la “forzaron tener al niño que pesó 3.250 gramos”, y las maniobras que hicieron durante el parto habrían influido en su muerte.
Un fuente del sector salud indicó que pudo existir negligencia médica en este caso, porque a la paciente le aplicaron una mala maniobra, es decir, al parecer se le se subieron sobre el abdomen para forzarla a parir, cuando debieron practicarle una cesárea o enviarla al Hospital central de Barquisimeto.
La pasan de anestesia
Horailuz del Carmen Segovia Domínguez, de 19 años, residente en el caserío La Sabana de Montecristo, es otra paciente que fue pasada de anestesia en el hospital de Carora y por esa causa lleva dos meses internada en la UCI del hospital Antonio María pineda de Barquisimeto, relató un allegado.
Su bebé quedó al cuido de sus suegros.
Habitantes de Carora manifestaron su pesar ante estos acontecimientos y pidieron la asignación de responsabilidades.
