Franklin Elías Aguilera llegó del estado Trujillo la noche de este jueves, a donde transportaba frutas y chatarra.
El viernes en la tarde, según versión de Mirian Sánchez, su madre, fue a la Plaza Los Ilustres de Barquisimeto para verse “con una novia nueva”.
Allí, el joven de 18 años, que el 19 de febrero cumpliría una año más, encontró la muerte, en uno de los pasillos de la concurrida plaza pública.
Franklin vivía con su madre y hermanos en El Jebe, pero se vieron forzados a mudarse a la avenida Carabobo, por temor a represalias, dado que era íntimo amigo “del que mató a Armandito, por eso lo andaban buscando”.
Construyó un rancho en Cambural, un sector de Yaritagua, estado Yaracuy, donde dormiría este viernes con su madre, hermana e hija, “que casualmente mañana (hoy) cumple tres años”.
-Nos enteramos de la muerte de un joven porque un vecino llegó a la casa a decirle a mi hija que en la plaza Los Ilustres habían matado a un tipo muy parecido a Elías, comentó la madre del fallecido.
Llegó al lugar un poco conmovida, en compañía de una hija, cuando el cuerpo tenía ya treinta minutos en el piso cubierto con una sábana, custodiado por dos efectivos de la Guardia Nacional y tres polilara.
Pidió a los funcionarios que le dijeran el nombre del fallecido, pero éstos le explicaron que no podían tocar el cuerpo, por tanto, desconocían su identidad.
Minutos más tarde, uno de los policías accedió a descubrir el cuerpo, lo que revelaría, primero a través de los zapatos y después el rostro ensangrentado, que era Franklin.
Foto: Emanuelle Sorge