Un hombre corriendo muy apresurado y tras él otro sujeto tratando de darle alcance dibuja lo que segundos después se trató de otra escena de muerte en Barquisimeto.
Fuertes sonidos de disparos alarmaron a quienes pasaban por la avenida Libertador, y atemorizaron al personal y pacientes que en ese momento se encontraban en los servicios del Instituto de Previsión y Asistencia Social del Ministerio del Poder Popular para la Educación (Ipasme), porque fue justamente frente a esta sede donde ocurrió el sangriento desenlace.
La víctima en esta oportunidad fue Efraín Adelmar Peraza (28), cuyo cadáver quedó extendido de medio lado en la puerta principal de la agencia de lotería El Rosario, ubicada en un centro comercial de la avenida Libertador, sector El Recreo, entrada al barrio San José.
Vivía en la calle 3 con carrera 7 de la mencionada barriada.
Posibles testigos señalaron que el infortunado caminaba por la isla central de la Libertador, y su atacante, al verlo de cerca, bajó de una moto que ocupaba como parrillero para acertarlo a tiros.
El hoy occiso se percató de las intenciones de su homicida y echó a correr para burlarlo, sin medir que a pocos metros la distancia se le acortaría.
Tras darle alcance, el asesino accionó una escopeta de la que salieron los perdigones que en segundos acabaron con la vida de Peraza, al causarle graves heridas en la región lumbar.
El instinto de Peraza hizo que levantara la mano derecha para protegerse de los disparos, trayéndole como consecuencia la pérdida del dedo índice por efecto del impacto de un perdigonazo.
Al tiempo que este hombre caía sin vida en el piso, el criminal escapaba del lugar, sin ser identificado por los curiosos.
Al lugar llegaron familiares del ultimado, que si bien lloraron la trágica pérdida, guardaron total silencio ante las preguntas de los representantes de los medios de comunicación con respecto a lo ocurrido.
Vecinos de Peraza comentaron que dejó una niña de tres añitos en la orfandad.
Efectivos del Eje Contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas levantaron el cadáver y lo trasladaron hasta la morgue del Hospital Central Universitario Dr. Antonio María Pineda.
Presumen venganza en cuanto al móvil. Extraoficialmente se conoció que poseía registros por robo agravado, asociación para delinquir y por droga.
Texto y fotos:
Richard Alexander Lameda