La aplicación para compartir videos TikTok entabló una demanda contra el gobierno del presidente Donald Trump por sus intentos de prohibir el popular servicio de propiedad china por razones de seguridad nacional.
TikTok, que es propiedad de ByteDance, insistió este lunes que no es una amenaza a la seguridad nacional y que el gobierno actúa para “promover la campaña política anti-China del presidente”. La compañía dijo que el gobierno actúa sin evidencia que respalde sus acusaciones y sin el debido proceso. Presentó la demanda el lunes en una corte federal en California contra el Departamento de Comercio, Trump y el secretario de Comercio, Wilbur Ross, y afirma que intenta evitar que el gobierno “prohíba de forma no permisible” a TikTok mediante la anulación de la orden ejecutiva de Trump.
Trump emitió en agosto dos órdenes ejecutivas. La primera, del 6 de agosto, impuso prohibiciones amplias, pero vagas, a cualquier “transacción” con ByteDance, que entrarían en vigor el 20 de septiembre. Una semana después, ordenó que ByteDance vendiera los activos estadounidenses de TikTok y le dio un plazo de 90 días. La demanda de TikTok no disputa la orden de venta.
En su denuncia, TikTok dijo que aunque la extensión total de la orden de prohibición del 6 de agosto sigue sin estar clara hasta que el Departamento de Comercio la detalle, la orden todavía representa “una amenaza existencial a las operaciones estadounidenses de TikTok”. Agregó que actuaría para bloquear las medidas que tome el Departamento de Comercio una vez que emita normas.
El Departamento de Comercio y la Casa Blanca no respondieron de momento peticiones de comentarios.
A lo largo del último año, TikTok ha intentado poner distancia entre su app, que afirma que tiene más de 100 millones de usuarios en Estados Unidos, y sus propietarios chinos. Nombró a un exejecutivo de Disney como director general para Estados Unidos y nombró a otros dos estadounidenses como director de seguridad y abogado general. TikTok también dijo que está dispuesto a vender sus operaciones estadounidenses y ha sostenido conversaciones con Microsoft para que compre partes de su app en idioma inglés. Según reportes, otras compañías e inversores también han expresado interés.