El presidente argentino Alberto Fernández anunció este viernes la extensión de la cuarentena hasta el 16 de agosto sin modificaciones ante el incremento de los contagios y las muertes por el nuevo coronavirus e instó a la población a evitar los contactos sociales.
“Vamos a mantener las cosas como están hoy… en los últimos días se nota que el virus circula más y esto genera internaciones y fallecimientos”, dijo Fernández al anunciar una nueva prórroga a partir del lunes de las medidas de aislamiento que rigen desde el 20 de marzo.
El anuncio lo hizo en un acto en el que estuvo acompañado por las autoridades de Buenos Aires y de la provincia homónima.
De esta forma el presidente desestimó que prosiga la flexibilización escalonada de las medidas de aislamiento que se inició hace quince días, particularmente en la capital y las localidades del alrededor donde las restricciones son mayores que en otros puntos del país.
Al respecto, dijo que en los últimos días los ciudadanos se “relajaron” aumentando sus contactos sociales y que la situación “está muy lejos de estar contenida”.
Buenos Aires y las localidades de los alrededores siguen registrando más del 90% de los contagios, pero la propagación del virus se ha incrementado en otros lugares, como las provincias de Córdoba y Santa Fe.
“Detesto decirles esto, porque me gustaría que Argentina funcione en plena normalidad, que todos podamos ir a trabajar…que funcionen espectáculos, restaurantes”, señaló Fernández sobre la larga cuarentena que ha generado una caída abrupta de la economía y un creciente malhumor social.
En Argentina se han registrado hasta ahora más de 185.000 infectados y cerca de 3.500 fallecidos, cifras muy por debajo de las de otros países de la región.
Aunque el presidente destacó que el país sudamericano muestra una situación de “privilegio” respecto a otros, acotó que hay un promedio de 80 fallecidos al día y que, desde que irrumpió la pandemia, cada 24 días se han duplicado la cantidad de fallecimientos, lo que consideró “un tema preocupante”.
En ese sentido, se dirigió en particular a los jóvenes a hacer un “esfuerzo” y cumplir las normas de aislamiento, evitando las “fiestas clandestinas” y otras reuniones sociales.
“Todos extrañamos el asado con los amigos, pero no podemos porque cada uno de esos encuentros es un riesgo enorme”, señaló.
El fútbol está paralizado y los colegios mantienen cerradas sus puertas en todo el país. Tampoco se pueden celebrar recitales y otros actos masivos. En la capital se puede pasear y hacer ejercicio físico al aire libre en determinados horarios y volvieron a abrir sus puertas las peluquerías, pero los gimnasios no funcionan y los restaurantes lo hacen bajo la modalidad de retiro de la comida.
Horacio Rodríguez Larreta, alcalde de Buenos Aires, indicó que el promedio de casos registrados en la ciudad es de unos 1.100 al día, lo que consideró un “nivel estabilizado pero alto, y el más alto del país”.
El alcalde dijo que el sábado dará más detalles de cómo transcurrirá la cuarentena en la ciudad. Está previsto que el cronograma de flexibilización de las medidas de aislamiento no avanzará tal como se había anunciado dos semanas atrás.