Diariamente en la parada de autobús que se ubica en la avenida Venezuela con avenida Vargas, en Barquisimeto, personas con la necesidad de viajar hasta Yaracuy esperan por alguien que les de “la cola” o “un aventón” hasta el peaje de Casetejas.
Desde que se decretó la cuarentena social por la COVID-19 y se agudizó la crisis de combustible en Lara, el transporte público fue restringido por las autoridades. “El suministro de gasolina solo será exclusivo para ambulancias, patrullas de organismos de seguridad, cisternas y vehículos que trabajen con distribución de comida”, dijo el pasado 23 de marzo el presidente del Sindicato Automotor en el estado Lara, Giovanni Peroza.
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Ante esto muchos ciudadanos que trabajan en Barquisimeto pero residen en Yaracuy, específicamente en el poblado de Yaritagua, quedaron “atrapados” en la ciudad tras el cierre de peajes, por lo que tuvieron que buscar alternativas para intentar llegar a su destino.
Para este 6 de mayo, cuando ya casi se cumplen dos meses en cuarentena social, hay quienes todavía intentan cruzar a Yaracuy y permanecen durante horas en las paradas esperando por el respaldo de quienes tienen vehículos y se dirigen hasta la frontera larense.
“No hay transporte para esa zona, yo tengo acá esperando desde las 6 de la mañana y nada que pasan, dependemos de alguna cola”, dijo a Elimpulso.com el señor Pedro Ríos, detallando además que en el peaje de Casetejas sí dejan cruzar a las personas hacia Yaracuy.
A lo largo de varios minutos, en la mencionada parada se observó la presencia de unas 8 personas, entre ellos una abuela, que hasta la fecha también se encuentra a la espera de poder trasladarse hasta Yaritagua.
