Ni la reducción de la producción de petróleo acordada por Rusia y Arabia Saudita, ni la caída del precio del crudo en los Estados Unidas, ni tampoco las decisiones tomadas por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), afectan a Venezuela, declaró Héctor Mantilla, economista y director de investigación y asesoría económica y financiera de la Asamblea Nacional.
Porque, explicó, Petróleos de Venezuela, S. A. (PDVSA) no está produciendo suficiente combustible, ni exportando las cantidades que antes tenía en el mercado, ni tiene recursos para hacerlo, ni mucho menos goza de confianza para que pueda recibir inversiones de empresas del mundo.
Sus declaraciones a Elimpulso.com, fueron hechas al ser consultado en torno a la caída del precio del petróleo en los Estados Unidos, fenómeno parecido a lo ocurrido hace 18 años.
El mundo vive una situación crítica en la economía, agravada por la aparición de la pandemia de la Covid-19. Las medidas preventivas para evitar el contagio ha hecho que disminuya la movilización aérea, marítima y terrestre en todas partes, que haya bajado la oferta y que estén cayendo los precios.
Pero, el problema venezolano es diferente: no tenemos gasolina, no obstante tener las mayores reservas petroleras más grande de toda la tierra y un complejo de refinación que llegó a ser el primero.
El asunto, dijo, es que ni a corto, ni a mediano plazo, por decir cinco o seis años, Venezuela tiene cómo hacer las cuantiosas inversiones para reactivar el ramo petrolero, que ha sido por cien años el más importante del país. De modo, pues, que lo que tenemos enfrente es que la falta de gasolina persistirá, así caigan mucho más los precios del combustile. Y se mantendrá la paralización del país, aunque mañana desaparezca la Covid-19.
