Como ocurrió en el 2011, este año que está por concluir no presenta muchas mejoras para los habitantes de Quíbor en cuanto a su vialidad, pues, salvo algunas de las principales avenidas, carreras o calles, la mayoría presenta fallas significativas.
Hace unos cuantos meses desde la alcaldía de Jiménez se anunció la utilización de ciertas cantidades de asfalto para recuperar las que se encontraban en malas condiciones, pero el material como que resultó insuficiente pues algunas vías permanecen prácticamente intransitables, como a inicios del año.
“Aquí no sirven muchas calles y nosotros tenemos que hacer maromas para poder pasar por muchos sitios que están malos desde hace tiempo, como la zanja de la urbanización Banco Obrero, que nunca han querido repararla”, dijo el conductor de una unidad del transporte colectivo urbano.
En efecto, en ese lugar, al norte, cerca de la iglesia La Ermita, existe un paso en una esquina que cuando llueve se convierte en una laguna y en verano es un polvorín y los vecinos y transportistas están cansados de pedir a la alcaldía su acondicionamiento sin encontrar respuestass positivas.
Pero en la zona norte no es sólo en Banco Obrero con la vialidad convertida en un desastre, pues existen otras calles o avenidas donde el asfalto desapareció hace años de la capa de rodamiento.
Algunos vecinos han optado por colocar obstáculos en la vía para impedir el paso de vehículos pues no soportan los baños de aguas turbias a las paredes de sus casas cuando llueve y se forman laguna ni las polvaredas que levantan al pasar que no permiten respirar a las personas.
En la zona norte de Quíbor los mayores deterioros en la vialidad se encuentran en sectores como La Ceiba 1 y 2, Primero de Mayo y El Estadio.
En la alcaldía no toman en cuenta que por allí se desplazan varias rutas del transporte colectivo urbano, cuyas unidades sufren constantemente deterioros, sobre todo en el tren delantero y frenos a causa de las permanentes caídas en huecos y zanjas.
La situación no es mejor en el sector sur de la ciudad al punto de que algunas calles quedan clausuradas en invierno como consecuencia de las inmensas lagunas que se forman.
Una de ellas es la avenida 5, concretamente en las inmediaciones de la manga de coleo, cada día más deteriorada por el constante tránsito automotor y la falta de mantenimiernto por parte de la alcaldía de Jiménez.
Por ella circulan vehículos de todo tipo, muchos de ellos hacia la carretera que conduce a El Tocuyo, así como aquellos que la utilizan para evadir los congestionamientos que se forman en el sector comercial.
También los vecinos han exigido el acondicionamiento total de ese tramo de unas dos cuadras pero, aparentemente, para el mismo no alcanzó nada de las toneladas de asfalto anunciadas por el alcalde para recuperar la vialidad de la capital del municipio Jiménez.
Esperan que el próximo año les tomen en cuenta y hagan algo que elimine tan perjudicial cáncer vial.
Fotos: Luis Salazar