La multitud celebra cuando la bola de hule penetra un pequeño círculo de piedra, como si fuera una portería, en una representación del juego de pelota prehispánico como parte de ceremoniales por el inicio de la nueva era maya en el parque mexicano de Xcaret.
Más de 5.000 personas atestiguan cada noche en Xcaret, una parque acuático en la Riviera Maya que recrea distintos monumentos prehispánicos, escenificaciones de rituales indígenas que estos días están dedicados a la llegada, el 21 de diciembre, del baktum 13, la unidad de tiempo de los mayas que equivale a 144.000 días.
«El 21 de diciembre es una día especial para la cultura maya. Lo celebramos como el preludio de un renacimieno de una nueva esperanza. Guardemos un minuto de silencio para escuchar nuestras almas y elevar un deseo por la paz», se anuncia por un altavoz al inicio del espectáculo.
En la representación se recrean rituales mayas como el encendido del fuego nuevo -que simboliza el inicio de la era-, danzas, el juego de pelota, en su modalidad tradicional y otra en la que las a las bolas se les prende fuego y van de un lado a otro de la cancha empujadas con palas de madera por los jugadores.
En la entrada del parque, una enorme piedra anuncia el número de días que faltan para el 21 de diciembre, cuando según la cuenta larga de la cultura maya inicia una nueva era de la humanidad.
Esta fecha, hallada en una estela maya (piedra tallada) en el estado mexicano de Tabasco (sureste) ha desatado sin embargo una andanada de predicciones catastrofistas del fin del mundo a partir de novelas y cintas producidas en Estados Unidos.
«La cultura maya es fascinante. Pero lo cierto es que nadie, sólo Dios, sabe cuándo y a qué hora se acaba este mundo», comenta mientras observa el espectáculo Nayeli Huérfano, un pastor adventista venezolano que vacaciona en Playa del Carmen.
En la Península de Yucatán, donde se localizan los balnearios de Cancún, la Riviera Maya y Cozumel, y sitios arqueológicos como Chichen Itzá, Tulum, Coba, entre otros, se preparan estos días distintos ceremoniales relativos al inicio de una nueva era.
La mayor concentración de visitantes se espera este viernes en Chiché Itzá, uno de las mayores expresiones arquitectónicas de la cultura maya donde se erige la majestuosa pirámide de Kukulkán.
«Estamos de vacaciones, pero vamos a aprovechar que viene el 21 de diciembre para visitar Chichén Itzá. He leído mucho sobre lo del fin del mundo, pero también he leído sobre la historia (de los mayas) y sé que las cosas no son así», afirma Jean-Pierre Sebastién, un turista canadiense de 28 años.
Según cifras de empresarios hoteleros de la zona turística del Caribe mexicano, esta temporada de dicembre, una de las más altas del año junto con el verano, se ha registrado un alza de 10% en la llegada de turistas, lo que atribuyen en parte a la difusión de la cultura maya por la llegada del baktum 13.
También se realizan eventos similares en Guatemala, Honduras, Belice y El Salvador, hasta donde llegó la influencia de la cultura maya.