Ante la mirada indiferente de las autoridades municipales están acabando las casonas que constituyen el casco histórico de Yaritagua, lo cual preocupa a los conservacionistas de esa ciudad yaracuyana.
La profesora Belkis Montilla, cronista del municipio Peña, ha venido advirtiendo sobre lo que está ocurriendo en ese sector donde los viejos inmuebles están siendo transformados o derribados para sustituirlos con edificios.
Planteó la necesidad de constituir una fundación que adelante una campaña para que eso no siga ocurriendo pues se corre el riesgo de que Yaritagua, en pocos años, pierda su casco histórico.
Mostró su satisfacción porque algunas de esas casas se han convertido en sedes de instituciones públicas, como la biblioteca pública.
Pedro Fernández, ex concejal y también preocupado por esa falta de atención del alcalde o los ediles actuales al caso, recordó la existencia desde hace años de una ordenanza de conservación del casco histórico que no se hace cumplir.
Hizo un llamado a las autoridades municipales para que se desempolve esa ordenanza y se instruya a los dueños de esos inmuebles sobre la prohibición de hacer cambios a sus fachadas y más aún, de derribarlos para construir edificios como ya ha ocurrido.
Foto: Luis Salazar