Cansados de atravesar una serie de penurias en sus actividades laborales, un grupo de empleados del sector salud del municipio Torres rompió el silencio frente a las instalaciones del Hospital General Dr. Pastor Oropeza Riera de Carora, este jueves.
Descontentos, exteriorizaron el llamado a las autoridades para que los doten de ambulancias y uniformes, para que les aumenten los sueldos y mejoren sus condiciones de trabajo.
Pero no solamente exigieron reivindicaciones para ellos, también elevaron su voz para que les permitan a los pacientes tener una mejor atención y asistencia en el primer centro asistencial de salud torrense, cuyos servicios cada día son peores.
La falta de agua es uno de los problemas a los que se tienen que enfrentar los trabajadores y pacientes, haciendo estos espacios insalubres y vulnerables a la propagación de cualquier virus o infección en contra del personal.
Igualmente, expusieron la falta de asignación me médicos en varias especialidades que dejaron de funcionar como oftalmología, otorrinoralingología, psiquiatría y dermatología.
También manifestaron la falta de consultas de triaje, así como la deficiencia operativa del servicio de laboratorio y de rayos X.
Los ascensores tampoco funcionan y las embarazadas deben subir por las escaleras hasta la sala de parto con los riesgos que conlleva la situación.
El retardo en la recolección de basura es otro serio inconveniente en el hospital de Carora, cuya basura se queda acumulada por varios días, generando focos de contaminación en el lugar.