La Corte Suprema de Estados Unidos cerró este martes el recurso judicial para los padres de un adolescente mexicano muerto a tiros en la frontera a manos de un agente estadounidense.
Los cinco jueces conservadores fallaron que los padres no pueden demandar al agente de la patrulla fronteriza Jesús Mesa Jr., quien mató en 2010 a su hijo de 15 años, Sergio Adrián Hernández Guereca, quien estaba desarmado.
El juez Samuel Alito escribió en la sentencia que el caso es trágico, pero la seguridad en la frontera y las relaciones internacionales fueron la causa del fallo contra los padres de Sergio.
La jueza Ruth Bader Ginsburg, en nombre de los cuatro jueces liberales que votaron contra el fallo, dijo que la demanda de los padres no pone en peligro la seguridad en la frontera ni la política exterior de Estados Unidos.
Mesa disparó su arma hacia México y abatió a Sergio, quien jugaba con sus amigos una tarde de junio. El juego consistía en tocar la frontera y regresar. Mesa se acercó en bicicleta, apresó a un amigo de Sergio y luego disparó hacia México. El balazo alcanzó a Sergio en la cara y lo mató.