Ya no es la quebrada El Mamón; tampoco Portachuelo. Ahora es el caserío Guacabra, ubicado en el kilómetro 9 de la carretera vieja hacia Caseteja, donde están asesinando personas. Durante el 2012 seis cadáveres han sido localizados en ese lugar. Esta vez fueron tres jóvenes quienes se encontraban maniatados y con tiros en rostros y cabeza.
Macabro hallazgo
A las 8:30 de la mañana de ayer Santos Giménez y su esposa Carmen Tovar, salieron de su vivienda ubicada en El Cercado e iban a hacer mercado en la población de El Cujizal, ubicada en la carretera vieja de Caseteja. La pareja cristiana decidió ir a Guacabra a buscar una ropa en casa de un amigo y se desviaron tomando un camino de tierra.
A 50 metros de la vía principal Tovar observó el cuerpo de un hombre tirado en la vía y le dijo a su esposo que estaba una persona borracha, pero a medida que avanzaron la marcha en su motocicleta vieron los tres cuerpos sin vida. Espantados ante tal hallazgo la pareja no se detuvo a pesar que la dama quería que su esposo lo hiciera. Siguieron hasta el módulo policial situado hacia el distribuidor Veragacha y dieron parte a las autoridades sobre el hallazgo.
Ajusticiados
Los funcionarios de Polilara fueron los primeros en llegar al lugar para resguardar la escena que era bastante aterradora. Eran tres jóvenes los asesinados.
El primer cuerpo estaba boca arriba. Se trata de un joven de entre 19 a 25 años de edad, de tez morena, contextura delgada, de aproximadamente 1,65 metros de estatura. En su abdomen tenía una cicatriz, al parecer una cortada. Vestía una franela azul, un blue jeans oscuro, correa marrón, sus zapatos deportivos gris con rojo y medias negras.
Al zapato que tenía en el pie izquierdo le faltaba la trenza. La franela la tenía puesta sobre su cabeza; el cuerpo estaba boca arriba, sus manos las tenía amarradas hacia atrás y estaban atados con unos cordones azules.
A un lado del primer cadáver se situaba el segundo; también boca arriba. Se trata de un joven de contextura delgada, de tez blanca, su edad oscila entre los 16 a 18 años y mide aproximadamente 1,70 metros.
Este muchacho vestía una franelilla blanca. La tenía puesta tapando su cabeza y parte del rostro, cargaba puesto jeans negro, una correa blanca y sus zapatos deportivos beige con rojo, cargaba un reloj negro con azul. Sus manos estaban hacia atrás y amarradas con el cordón rojo de uno de sus zapatos.
Frente a esos dos cuerpos que estaban del lado derecho del camino se encontraba un tercer cadáver: la distancia era al menos de cinco metros. Yacía sobre unos escombros y estaba boca arriba. Su rostro estaba destapado y se veía claramente que tenía frenillos. Su estatura, de 1,80 metros, contextura media, tez blanca y con una edad entre los 25 a 30 años.
Su rostro fue tapado por los curiosos con una tela verde. Para el momento del hallazgo vestía una chemise amarilla con rayas blancas, un blue jeans oscuro, correa marrón, y zapatos Adidas azul con blanco.
La ropa de este joven, al contrario de los demás, se notaba era nueva, incluso la suela de sus zapatos estaba muy limpia. Ambos zapatos estaban sin trenzas. Fueron usadas para maniatar el primer cuerpo.
Este joven tenía puestos dos anillos, uno plateado en la mano izquierda y en su mano derecha tenía otro plateado con negro y estrellas. Sus manos estaban maniatadas con una trenza gris que eran del primer cuerpo.
Un equipo multidisciplinario conformado por técnicos, planimétrico e investigadores del Eje Contra Homicidio del Cicpc, llegaron hasta el lugar para comenzar las pesquisas del triple homicidio.
Al primer cadáver se le apreció un disparo en el pómulo izquierdo y adyacente a su cráneo fueron localizadas tres conchas y un proyectil. El segundo tenía tiros en su cabeza, cuello y brazo izquierdo, pero a un lado de su pie estaba otra concha.
En el camino entre los tres cuerpos fueron localizadas dos conchas más, para un total de seis, aparentemente provenientes de una pistola calibre 9 milímetros.
Los sabuesos supervisaron toda la zona y su búsqueda fue minuciosa para recabar todas las evidencias que podrían tener relación con el triple homicidio. Se determinó que el sitio fue de ejecución y no de liberación. Aparentemente los jóvenes habrían sido asesinados la noche del miércoles, entre las 10 de la noche y 12 de la medianoche.
Sin identidad
Los tres jóvenes no portaban identidad alguna. Al lugar no llegaron dolientes y hasta horas de la tarde a la morgue no se había acercado nadie para identificar los cuerpos.
Por la cercanía con El Ujano y El Cercado se llegó a creer que son personas que viven por esa zona, pero también se rumoró que las víctimas podrían ser de Cabudare.
Quedará de parte de las autoridades establecer un móvil del caso una vez se sepan las identidades de los fallecidos.
Casos similares
Cabe destacar que este triple homicidio, con evidentes signos de ajusticiamiento, es el tercer caso que se registra durante el 2012 en Guacabra.
El primer hecho ocurrió el 2 de marzo. Fueron localizados los cuerpos de Yernaín Andueza (23), estudiante de la UCLA, y Jhory Alberto González Meléndez (22) agricultor. Señalaron a presuntos funcionarios de la Policía del estado de llevárselos de la avenida 20 con Vargas un viernes en la noche. Los ultimaron en la madrugada del sábado y fueron encontrados el domingo 3 de marzo.
El 25 de mayo, en dicho lugar, encontraron a José Rafael Duno Duno (21) residente de la Ruezga Norte, quien fue localizado en dicho lugar, luego de ser llevado con su vehículo, lo bajaron y asesinaron de múltiples disparos en su rostro.
Habitantes de la zona esperan que Guacabra no se convierta en un lugar de muerte.
Fotos: Elías Rodríguez
