Venecia vuelve a sufrir el fenómeno del agua alta, que esta mañana alcanzó un pico de 144 centímetros y cubrió el 60% del casco histórico, aunque sin que se cumplieran los pronósticos que advertían de una marea de hasta 150 centímetros.
En la madrugada las sirenas de alerta sonaron en dos ocasiones, a las 4:00 a.m. y a las 6:40 a.m. con el empeoramiento de los pronósticos, y finalmente el nivel máximo se alcanzó a las 9:40 a.m. con una altura del agua de 144 centímetros.
Una marea excepcional pero lejos de los 184 centímetros que se alcanzaron el pasado 12 de noviembre y que sumergieron el 70% de la ciudad causando daños por millones de euros.
Añadió que si bien Navidad nunca ha sido un período de plena ocupación, «un hecho sorprendente es el del Año Nuevo: si el año pasado la ocupación fue del 100%, este año es inferior al 50%».
Los hoteleros creen que las imágenes que dieron la vuelta a mundo de la ciudad y su emblemática plaza de San Marcos inundada han causado un daño paralelo al de la propia marea, con una riada de cancelaciones de reservas.
Aseguran que el «agua alta» es un fenómeno «ordinario, pasajero y que forma parte de la vida de los venecianos desde siempre» y que «ocasionalmente y solo en algunas áreas de la ciudad, hay que caminar sobre pasarelas que ya están configuradas precisamente porque la marea no sorprende a los venecianos».
También aclararon que el punto de partida para calcular la marea sobre la ciudad es un punto mareográfico 0 de Punta della Salute, y que cuando se habla de 187 centímetros de la altura del agua eso no es lo real.
«La ciudad está, en el 97%, a unos 100 centímetros sobre el nivel del medio del mar. Y por lo tanto, por ejemplo, una marea excepcional de 140 centímetros, que ya es rara, corresponde en realidad a unos 60 centímetros de agua en los puntos más bajos de la ciudad, como la Plaza de San Marco, e inunda aproximadamente el 54% del centro histórico», añadió.