De un leñazo, Carlos Correa puso fin a un tenso duelo de relevistas en innings extra. Y evitó que los Astros se dirigieran al Yankee Stadium con una desventaja de 2-0.
Correa disparó un bambinazo ante el primer lanzamiento que le hicieron en la undécima entrada, y los Astros de Houston superaron el domingo 3-2 a los Yanquis de Nueva York para igualar la Serie de Campeonato de la Liga Americana a una victoria por bando.
El boricua, sumido en una mala racha con el tolete, volvió a la vida en el encuentro. Aportó además un doble productor y una jugada sensacional en el campocorto.
Y en el comienzo de la parte baja del undécimo episodio, desapareció la esférica por el jardín derecho frente a J.A. Happ.
“El béisbol es un deporte hermoso”, recalcó.
El torpedero de Ponce se dio tiempo de contemplar el vuelo de la pelota hacia el prado contrario, mientras se llevaba una mano a un oído para escuchar mejor la ovación atronadora del Minute Maid Park.
Con un índice en alto, comenzó su recorrido por las bases y, al aproximarse a home, lanzó su casco como si fuera una pelota de basquetbol, hacia sus compañeros que lo esperaban para la felicitación tumultuaria.
El tercer juego está programado para el martes por la tarde en el Yankee Stadium. Gerrit Cole, quien tiene una foja de 18-0 en sus últimas 24 aperturas y quien lideró las mayores en ponches, será el abridor de los Astros, frente al dominicano Luis Severino.
Durante un tiempo en esta temporada, Correa se vio imposibilitado de jugar por un problema de espalda. El pelotero elegido al Juego de Estrellas comenzó la jornada bateando de 22-3 durante estos playoffs.
Los Yanquis empataron un récord de la Serie de Campeonato al recurrir a nueve lanzadores. Los ocho relevistas habían tolerado apenas una carrera y dos imparables con 11 ponches antes del cuadrangular de Correa, que puso fin a un duelo que duró cuatro horas y 49 minutos, y que concluyó alrededor de la medianoche.
Houston utilizó a cinco relevistas, quienes se combinaron para cubrir cuatro entradas y un tercio, sin admitir carrera y con pelota de un hit, después de que Justin Verlander se marchó de la lomita.
Al comenzar esta serie a un máximo de siete juegos, se consideraba que los Yanquis tenían el mejor bullpen. Los Astros lo pusieron en duda el domingo.
“Nuestro bullpen fue tremendo. Nos dio la oportunidad de ganar el juego”, valoró Correa.
Gary Sánchez se ponchó sin tirarle para poner fin a la parte alta del undécimo capítulo, con corredores en primera y segunda. El lanzamiento pareció pegado, y llegó después de que el dominicano había abanicado con dos strikes.
En ese momento, lo salvó del ponche un error del umpire, quien marcó un foul.
Nueva York sufrió su primera derrota en esta postemporada, luego de hilar cuatro triunfos.
“Lo de esta noche fue una lucha”, comentó el manager de los Yanquis, Aaron Boone. “Es difícil anotar carreras contra ellos, especialmente en una noche en que tienen a Verlander ahí”.
Aaron Judge puso a Nueva York Adelante por 2-1, con un jonrón de dos carreras ante Verlander en el cuarto acto. Fue su primer bambinazo en estos playoffs y el octavo de su carrera en postemporada.
Correa había remolcado la primera carrera del encuentro con un doble que le permitió cortar con una racha en la que se había ido de 14-0.
Horas después, sentenció el final del encuentro con su palo de cuatro esquinas.
“Buscaba algo por el centro del plato, que pudiera batear hacia el otro lado”, relató. “Me hizo el lanzamiento perfecto para lograrlo”.
Por los Yanquis, el venezolano Gleyber Torres de 5-1. Los dominicanos Edwin Encarnación de 4-0, Gary Sánchez de 5-0. El colombiano Gio Urshela de 4-0.
Por los Astros, los venezolanos José Altuve de 4-2, Robinson Chirinos de 4-0. Los cubanos Yordan Álvarez de 4-0, Yuli Gurriel de 5-0. El puertorriqueño Correa de 5-2 con una anotada y dos impulsadas.