Una delegación de Bolivia estará en la Corte de La Haya para el inicio el lunes del juicio por límites marítimos que Perú presentó contra Chile, informó el domingo el gobierno boliviano, que dijo que también demandará a Santiago por su reclamo de salida al mar.
El director de la gubernamental Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar), Juan Lanchipa, dijo que el objetivo «es efectuar un seguimiento de primera mano a las argumentaciones que ambos países expondrán ante La Corte, esto con la finalidad de determinar las implicaciones jurídicas de estas alegaciones para el diseño de la demanda marítima de Bolivia».
El lunes comienzan en Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya los alegatos orales, que durarán unas dos semanas, de Perú y Chile.
Lima presentó en 2008 ante la CIJ una demanda contra Chile al considerar que los límites marítimos no están definidos y pidió establecer una frontera.
Chile, por su parte, dice que no hay tema pendiente, pues la demarcación fue definida en acuerdos en 1952 y 1954.
Diremar es la principal instancia gubernamental en estudiar la demanda legal que Bolivia presentará, aún sin fecha, contra a Chile ante un tribunal internacional, probablemente el de La Haya, por su centenario reclamo de una salida soberana al océano Pacífico.
El presidente Evo Morales había anunciado en marzo del año pasado que Bolivia iría a instancias internacionales, con el añejo pedido de una salida al mar, tras un diálogo con Chile iniciado en 2006 con una agenda de 13 puntos que incluía este asunto, pero que no fue resuelto en la mesa de conversaciones.
Bolivia y Chile se enfrentaron en una guerra en 1879, firmaron un tratado de paz y límites en 1904. La última vez que sostuvieron relaciones diplomáticas fue en 1978, cuando se intentó un canje de mar por territorios, mientras ahora el presidente Morales reiteró varias veces que Santiago incumple el acuerdo fronterizo.
Lanchipa anunció que además de él, integran la delegación que estará en La Haya el vicecanciller, Juan Carlos Alurralde; el embajador en los Países Bajos, Roberto Calzadilla, y el expresidente de la Cámara de Diputados, Héctor Arce.
Chile manifestó varias veces su molestia por la decisión boliviana de ir a un tribunal internacional e insistió en todos los tonos que no tiene asuntos pendientes con Bolivia, a la que pidió retomar la mesa de diálogo.
