Cuatro ciudadanos chinos empleados de una empresa petrolera, presuntamente secuestrados por la guerrilla FARC desde junio de 2011, fueron liberados la noche del miércoles en el sur de Colombia, confirmó a la AFP una vocera de la embajada de China en Bogotá.
«Fueron liberados los cuatro, anoche, en el departamento de Caquetá. Están de buen ánimo», dijo la agregada de prensa de la embajada.
La funcionaria señaló que hasta ahora desconoce quién los mantenía cautivos. «No sabemos quiénes fueron sus secuestradores», dijo al confirmar que los cuatro son de nacionalidad china.
El secuestro de estas cuatro personas, tres ingenieros y un traductor, ocurrió en Caquetá y había sido atribuido por las autoridades a la guerrilla comunista FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), que acaba de iniciar un diálogo de paz con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
Los rehenes trabajaban para la petrolera Emerald Energy, empresa con sede en el Reino Unido y filial del grupo chino Sinochem.
En el momento de su secuestro los cuatro ciudadanos chinos viajaban con un conductor colombiano liberado horas después.
El jefe de la Policía Nacional de Colombia, general José Roberto León Riaño, también confirmó la liberación.
«Se trató de una operación de asistencia humanitaria solicitada por el CICR (Comité Internacional de la Cruz Roja) y por las autoridades chinas y son ellos los que han hecho toda esa coordinación para obtener esa liberación», dijo el oficial a la prensa.
El CICR y las autoridades chinas «solicitaron al gobierno colombiano una asistencia humanitaria, entonces se procedió a prestar esa asistencia», señaló León Riaño, sin especificar qué tipo de colaboración se brindó.
El Comité Internacional de la Cruz Roja aún no ha informado sobre estas liberaciones, pero se espera que emita un comunicado en la jornada.
Aunque no precisó qué grupo entregó a los rehenes, el jefe policial evocó que «desde el mismo momento del secuestro, por informaciones de inteligencia, se llegó a conocer que las FARC eran las que tenían a los ciudadanos chinos».
Las FARC, creadas en 1964 y con unos 9.200 combatientes en la actualidad, lanzaron en octubre pasado un proceso de paz con el gobierno de Colombia, tras anunciar a principios de este año que renunciaban al secuestro de civiles motivado por extorsión económica.
En ese contexto, la guerrilla liberó a principios de abril a los últimos diez policías y militares que afirmaba mantener en su poder.
Sin embargo, asociaciones de víctimas en Colombia acusan a las FARC de tener todavía una cantidad indeterminada de rehenes.