A pesar de la promesa del presidente Hugo Chávez, de convertir a Venezuela en una gran potencia agrícola en América Latina, el sector agropecuario se mantiene estancado.
Han transcurrido 14 años desde entonces y el desarrollo del sector agrario nacional sigue siendo una promesa.
La bonanza proveniente de la renta petrolera le ha permitido al Gobierno mantener una política de importaciones masivas para sustentar el consumo de alimentos de la población, estrategia que ha ayudado a cubrir el déficit de la producción nacional.
Pero la masificación de las importaciones se aplica en momentos cuando los precios internacionales registran los máximos históricos, generando un gasto sin precedente en la compra de alimentos a otros países.
De acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), entre enero y julio de 2011 y el mismo período de 2012, el valor de las importaciones del sector agrícola y vegetal pasó de 1.478 millones de dólares a 3.064 millones de dólares, lo que quiere decir que se destinó 107,3% más dinero que un año atrás para importar alimentos.
El área agrícola y vegetal es el sector que registra mayor incremento en la partida asignada para las compras en el exterior, según el INE.
Al revisar el histórico destacan las importaciones de animales vivos, donde el grueso de la categoría está representado por animales bovinos, cuyas importaciones pasaron de 50,33 millones de dólares en 1998 a 529,85 millones de dólares al cierre de 2011.
El mandatario nacional ha insistido en la necesidad de rescatar las tierras con vocación agrícola y «democratizar» los precios a través de la lucha contra el latifundio, para garantizar la eficiencia de las mismas y elevar la producción, “con miras a la autosustentabilidad, la sustitución de importaciones y hasta la exportación de alimentos a otras latitudes”.
Lo cierto es que en los últimos 14 años las importaciones de alimentos y, sobre todo de materias primas agrícolas, se han incrementado exponencialmente, mientras que la producción interna diminuye cada año, se extrae de los números del INE.