Para recordar:
¡Fariseo ciego! Limpia primero lo de adentro del vaso y del plato, para que lo de afuera también quede limpio”
(Mateo 23:26).
Venezuela está viviendo uno de los momentos más difíciles de su historia. Mientras tiene una de las inflaciones más alta del mundo; cuando se necesita la ayuda humanitaria, y el caos reina por doquier, se dio el anuncio, el 16/01/19, de invertir 1.000 millones de Euros destinados para llegar a tener una Venezuela Bella (noticiasbarquisimeto.com y vicepresidencia.gov.ve).
Favorecer el país, tal vez nos es tan mala idea, pero ¿Venezuela Bella? Es aparentar y decirle al mundo: Acá no hay problemas económicos; la plata va a correr como ríos por las calles. Pero, antes de embellecer: ¿No sería mejor hacer los esfuerzos para poner a producir nuestro país?
Todo lo anterior es como tener una fruta que está bella por fuera, pero podrida por dentro. Es como pintar la fachada de una casa, pero internamente la casa está en ruinas.
El verso bíblico dice: “¡Fariseo ciego! Limpia primero lo de adentro del vaso y del plato, para que lo de afuera también quede limpio” (Mateo 23:26).
Por muchos años, quienes han regido a Venezuela, han vivido en una sola apariencia y muchos lo han hecho por la ambición y hasta para llegar a figurar en la historia.
En ese sentido, J. Elías (2016), define esta apariencia como: “…el complejo de Eróstrato, quien fue una persona de Éfeso, que en el 356 a.C., incendió el templo de Diana, sin importarle la destrucción de una maravilla de la antigüedad, tan solo para darse a conocer (elmundo.es)” ¡Qué locura!
Esconder la realidad es muy malo y hay gobiernos que son especialistas en esto, tan solo para estar en el poder. Esto se ha convertido en una fruta podrida que continúa acabando con el planeta y ha contaminado a muchos.
Tal vez por ello, Seiglie, Mario (2014) publicó un trabajo, cuyo título es: “Las manzanas podridas que están carcomiendo a la sociedad” (espanol.ucg.org/las-buenas-noticias). Nos llamó la atención que entre las cinco manzanas que nombró, la primera se refiriere al “Comunismo de Carlos Marx” y resaltó aspectos como: 1) Marx promovió el ateísmo (Dios no existe). 2) La verdad es relativa. 3) Un gobierno de un solo partido político debe ser el dueño de toda la riqueza de un país… Esto significa que la meta es ejercer control sobre la economía, la política, la educación y la religión. 4) Los bienes deber ser compartidos comunitariamente (de allí el término comunismo) y de esta manera la gente vivirá en paz y armonía ¡Imposible! Terrenalmente hablando.
Allí Seiglie, antes mencionado, citó a Alexander Solzhenitsyn, un disidente que sufrió en los campos de concentración soviéticos y más tarde ganó el Premio Nobel de Literatura, declaró en una ocasión: “Si hoy día se me pidiera que formulara de la manera más concisa posible la causa principal de la funesta revolución [soviética] que acabó con aproximadamente 60 millones de nuestros ciudadanos, no podría expresarlo de manera más precisa que repitiendo: El hombre se ha olvidado de Dios; por eso es que ha sucedido todo esto … ”
Las personas que no reconocen la existencia de Dios, pudieran sentirse vacíos por dentro. El Eterno nos pide que nuestro adorno sea interior y no exterior (1ª Pedro 3:3) y todo quien haga la voluntad de Dios recibirá el premio de la vida eterna y El dirá: “…los limpiaré. Y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios” (Ezequiel 37:23; Apocalipsis 21:3).
Eduardo Iván González González
www.ventanabiertalmundo.com
