La división de vehículos autónomos de Google está lista para sacar provecho de la tecnología que lleva desarrollando hace casi una década. Waymo introdujo este miércoles un servicio de alquiler de vehículos a pequeña escala en el área de Phoenix que incluirá un humano detrás del volante en caso de que falle el vehículo robotizado.
El debut es un importante hito para Waymo, una empresa que comenzó como proyecto secreto dentro de Google en 2009. Desde entonces sus vehículos autónomos han transitado 16 millones de kilómetros (10 millones de millas) en caminos públicos en 25 ciudades en California, Arizona, Washington, Michigan y Georgia con muy pocos accidente, la mayoría de ellos colisiones menores.
La empresa operará inicialmente el nuevo servicio con cautela, lo que pone en evidencia los desafíos que todavía enfrentan sus vehículos autónomos mientras navegan en medio de coches con conductores humanos que no siempre siguen las mismas normas que los robots.
El servicio llamado Waymo One en un principio sólo estará disponible para unos 200 usuarios que ya antes participaron en un programa que comenzó en abril de 2017. El proyecto estará confinado a un área de 258 kilómetros cuadrados (100 millas cuadradas) en y alrededor de Phoenix, incluyendo las ciudades vecinas de Chandler, Tempe, Mesa y Gilbert.
Aunque Waymo ha estado transportando a pasajeros sin humanos detrás del volante en su programa piloto gratuito, esta vez decidió ser menos audaz con su nuevo servicio comercial.