A ti me dirijo si leíste mi artículo en El Impulso del domingo 14 Octubre 2018. En él te hacia una pregunta: “¿Qué haces tú por mejorar Venezuela?”. Seguramente, muchos de los lectores de ese día se dijeron a si mismos: “no es mi problema, que lo lleve a cabo Ostériz, los gobernantes, los políticos…. A ellos y a Ud. –si opinó así- va dirigido éste artículo y el del próximo domingo: 04 Noviembre 2018. Léalos por favor. Sea un verdadero ciudadano de Venezuela.
Un antiguo cuento indio nos enseña la indiscutible verdad de nuestras creencias interiores y su poder en el desarrollo pleno del ser:
Un guerrero indio se encontró un huevo de águila, lo recogió del suelo y colocó más tarde en el nido de una gallina. El resultado fue que el aguilucho se crió junto a los polluelos.Así, creyéndose ella misma gallina, el águila se pasó la vida actuando como éstas. Rascaba la tierra en busca de semillas e insectos con los cuales alimentarse. Cacareaba y cloqueaba. Al volar, batía levemente las alas y agitaba escasamente su plumaje, de modo que apenas se elevaba un metro sobre el suelo. No le parecía anormal; así era como volaban las demás gallinas.
Un día vio que un ave majestuosa planeaba por el cielo despejado. Volaba sin casi batir sus resplandecientes alas dejándose llevar gallardamente por las corrientes de aire, la luz del sol acariciaba su plumaje mostrándola como un ser casi divino.
¡Qué hermosa ave! -le dijo a la gallina que se hallaba a su lado. ¿Cuál es su nombre?
Águila, la reina de las aves – le contesto ésta. Pero no te hagas ilusiones: nunca serás como ella. El águila dejó, en efecto, de prestarle atención. Y con el tiempo murió creyendo que era gallina…
Este cuento nos enseña la fuerzo que tienen los pensamientos. Tu cerebro, tu mente es la maquinaria del potencial ilimitado de tu ser, ahí es donde puedes programar tu misión en la vida, tus sueños, tus valores y principios, pero también, es donde puedes programar tu incapacidad, tus limitaciones, tus frustraciones, tus miedos, y falsas expectativas acerca de ti mismo.
Así como puedes ver, el resultado positivo o negativo que obtengas en la vida, depende básicamente de lo que depositaste en tu mente. La miopía mental, no nos permite vislumbrar las capacidades y potenciales que todos los seres tenemos para triunfar. Si tu crees que puedes, lo harás. El llamado a la libertad, el éxito y la riqueza es un llamado universal, no es un llamado para unos cuantos, ya que nadie fue creado para ser un mediocre. Todos los seres humanos nacimos con una misión especial en la vida, que Dios nos ha dado, pero que posiblemente no has hecho valer. Tu paso por este mundo no es una simple casualidad, más bien es una causalidad.
Para diferenciar “casualidad# y “causalidad” entendamos el siguiente principio: Si tu carro esta estacionado en la vía publica y de improviso se parte una enorme rama y le cae encima haciéndolo añicos… esta es una “casualidad.”
Si vas a estacionar tu carro en la vía pública, y ves que están talando los árboles los trabajadores del Aseo Municipal, y te comentan que una rama puede caer sobre el carro si lo estacionas ahí, no te importa y lo estacionas, y la rama cae justo encima del carro haciéndolo añicos … esta es una “causalidad.” Tu fuiste el causante de la circunstancias.
Conclusión por hoy
Tu paso por este mundo que es la Venezuela hiperinflacionaria, violada la Constitución por sus gobernantes infinidad de veces, abandonado el Soberano por la mayoría de sus dirigentes políticos, etc, etc, etc… es una causalidad. Tú estás en este mundo por algo, existe una causa para que vivas: “la Constitución da el Poder al Soberano” pero tú y solamente tú así como millones de ciudadanos, tienen el derecho de hacer valer tal Poder: tu propia causa o puedes optar por negarte la oportunidad y seguir siendo una gallina.
(Próximo domingo, no te pierdas el final del cuento)