Hay pocas probabilidades de que haya algún sobreviviente entre las personas que se teme quedaron enterradas bajo un enorme alud provocado por el tifón Mangkhut, de acuerdo con un alcalde de Filipinas. Mientras, los rescatistas seguían excavando el lunes a través de la montaña de lodo y escombros que cubre una capilla donde se habían refugiado.
Victorio Palangdan, alcalde de la localidad de Itogon, en la provincia de Benguet, dijo que hay un 99% de probabilidad de que los 40 a 50 mineros y sus familias que quedaron sepultados estén muertos. La provincia fue una de las más afectadas por el tifón que azotó el territorio el sábado.
Se confirmaron 65 muertes provocadas por Mangkhut en Filipinas. Otras cuatro personas fallecieron a causa de la tormenta en China, donde se debilitó a tormenta tropical a medida que se adentraba al territorio el lunes.
Palangdan dijo que los rescatistas han recuperado 11 cuerpos tras el deslizamiento, que cubrió un antiguo barrancón de mineros que se había convertido en una capilla. Docenas de residentes se refugiaron ahí durante la tormenta, pese a que les advirtieron que era peligroso.
«Se rieron de nuestros policías. Insistieron en refugiarse ahí», dijo el alcalde. «Se resistieron cuando nuestros agentes intentaron sacarlos. ¿Qué podemos hacer?».
Cientos de rescatistas con palas y picos, incluidos elementos de la policía y del Ejército, buscaban a los desaparecidos en la avalancha de lodo _ocurrida junto a la ladera de una montaña_ mientras familiares afligidos esperaban cerca, muchos de ellos rezando en voz baja. Los cadáveres recuperados fueron colocados en bolsas negras uno al lado del otro. Los familiares se llevaron los de las personas que fueron identificadas.
El lunes, Mangkhut seguía azotando el sur de China y a las provincias de Guangdong, Guangxi y Hainan con fuertes lluvias y vientos que se prevé continúen para el martes.
Por la tarde del lunes, el tifón se encontraba a 200 kilómetros (124 millas) al oeste de la ciudad de Nanning, en la región de Guangxi, y se movía hacia el noroeste. Conforme avanzaba, Mangkhut se iba debilitando.
Hasta el momento, no había más reportes de víctimas o daños.