La terrible emergencia que está viviendo el municipio Palavecino con los servicios básicos cada vez se recrudece más, tanto así que Daniel Orellana, edil del Concejo Municipal de Palavecino asevera que ese municipio está en riesgo de insalubridad.
«La no recolección de basura por parte de la empresa dedicada a la recolección de desechos sólidos y el deficiente trabajo de Hidrolara hace que tengamos en riesgo a la población», refiere.
Orellana da estas declaraciones tras las constantes protestas suscitadas en distintas urbanizaciones y sectores de Cabudare esta semana, las cuáles él ha respaldado porque afirma que el pueblo de Palavecino está «cansado» de ser ignorado por la alcaldesa Mirna Víes.
Él manifiesta que el pueblo no pide «articulaciones» sino «soluciones definitivas». «Cuando hay reuniones de entes gubernamentales con las comunidades. les dicen que harán articulaciones con empresas del Estado porque ya el gobierno no puede hacer inversión total a todos los equipos», dijo.
Recordó que actualmente en Palavecino trabajan dos líneas de bombea de agua: El Recreo y Carabalí; el primero trabaja a menos de 30% y el segundo al 30% pero debe compartir parte del servicio con el este de Barquisimeto.
En vista de esta terrible situación, Orellana especula que con el aumento de sueldos el gobierno tendrá que aumentar las tarifas de los servicios, considerando esto «una gran estafa».
«El pueblo venezolano va a tener que pagar la ineficiencia del gobierno para que los servicios públicos puedan funcionar», completó.
Situación en Barquisimeto es parecida
El homólogo de Orellana en Iribarren, Ibrahin Querales comentó a EL IMPULSO que la situación de los servicios en Barquisimeto, especialmente la recolección de desechos sólidos y el transporte, cada vez se agrava.
«Lamentablemente hay una descoordinación con la secuencia de la recolección de basura, especialmente en las parroquias Juan de Villegas, Unión, Cují y Tamaca. hemos hablado con el presidente de Imaubar, Frank Sánchez para tratar de mejorar estas recolecciones pero aún falta mucho», refirió.
En el tema de transporte, Querales no ve que la Ordenanza Municipal sea la solución ideal para que los chóferes de unidades quieran trabajar, sino que más bien los «ahuyenta».