Un explosivo colocado por un desconocido en el zapato que un diputado paquistaní había dejado en la puerta de una mezquita, antes de ingresar en el templo, hirió a doce personas, incluyendo el parlamentario, pero ninguna de las víctimas corre riesgo de muerte, indicaron fuentes oficiales.
Una persona desconocida puso un explosivo en el zapato de Ahmedan Bugti, diputado de la Liga Musulmana de Pakistán, que forma parte de la coalición que gobierna el país.
El parlamentario se había sacado dicho calzado para ingresar en una mezquita, en Dera Bugti, a unos 500 kilómetros al este de Quetta, capital de la provincia de Baluchistán, indicaron la policía y dirigentes locales.
«La pierna de Bugti sufrió heridas graves, se dispuso un helicóptero para trasladarlo a Quetta», declaró el ministro del Interior de la provincia, Akbar Durrani.
Nadie había reivindicado lo ocurrido.
En Baluchistán, rebeldes reclaman una mayor autonomía política y un reparto más justo de los ingresos de la provincia, que cuenta con yacimientos de petróleo y gas.