Al término de la 107a Conferencia Internacional del Trabajo celebrada en Ginebra, Suiza, el Consejo de Administración, máxima autoridad de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en su 333a reunión del 9 de junio de 2018, aprobó la designación de los tres miembros que integrarán la Comisión de Encuesta (o Investigación) para Venezuela, escogidos entre destacados juristas de la región, en consideración a sus credenciales y trayectoria profesional.
Presidirá la Comisión de Encuesta, Manuel Herrera Carbuccia, Doctor en Derecho y Presidente de la Tercera Sala (Tierras, Laboral, Contencioso-Administrativo y Tributario) de la Suprema Corte de Justicia de República Dominicana, profesor de la Escuela Nacional la Judicatura y de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra. Los otros miembros son María Emilia Casas Baamonde, Doctora en Derecho, catedrática de Derecho del Trabajo y Seguridad Social de la Universidad Complutense de Madrid, España y Santiago Pérez del Castillo, Doctor en Derecho y Ciencias Sociales, profesor de Derecho Laboral y Seguridad Social de la Universidad de la República del Uruguay y rector de la Universidad de Montevideo, quien fuera miembro gubernamental del Comité de Libertad Sindical de la OIT.
La designación de la Comisión de Encuesta para el país fue acordada el pasado mes de marzo de 2018, en el marco de la Queja conforme al artículo 26 de la Constitución de la OIT introducida, en junio de 2015, por Fedecámaras y otras 33 organizaciones empleadoras del mundo.
En el Consejo de Administración, el Gobierno de Venezuela rechazó la conformación de la Comisión de Encuesta, con lo cual nuevamente se pierde una oportunidad de iniciar un proceso de diálogo serio, efectivo y productivo que pueda conducir a soluciones consensuadas entre los distintos actores sociales, a la grave crisis económica y social que atraviesa el país.
La Comisión de Encuesta, en todo caso, se instalará y sesionará fuera del territorio nacional, según los procedimientos establecidos en las normativas aplicables de la OIT, a los fines de recabar el mayor número de pruebas necesarias que le permitan, posteriormente, presentar el Informe con sus recomendaciones.
La celeridad con la que la OIT ha atendido la instalación de la Comisión de Encuesta, refleja la gravedad de las violaciones de los Convenios ratificados por Venezuela y la relevancia de este caso en el seno del organismo internacional, pues en sus 100 años de existencia, sólo en 12 oportunidades, ha sido acordada una Comisión de Encuesta, siendo ésta la última y más importante instancia de control de la OIT.
Previamente, han sido aprobadas Comisiones de Encuesta en casos emblemáticos, tales como la iniciada en Nicaragua en 1987 por los empleadores contra el gobierno del Frente Sandinista de Liberación Nacional y que finalizó en 1990, bajo la Presidencia de Violeta de Chamorro, así como la establecida en 1982, a solicitud de Lech Walesa, en nombre del sindicato de trabajadores Solidarnósc de Polonia, que contribuyó a la transición de ese país hacia la democracia.
Esta Comisión de Encuesta busca que el Gobierno convoque a los actores sociales a un diálogo social auténtico y efectivo bajo las características definidas por la OIT: cese de la intimidación, respeto mutuo, establecimiento de una agenda concertada de trabajo con cronograma de reuniones, objetivos y acciones definidas, participación plural de las organizaciones de trabajadores y un ambiente neutral y de discreción.
Fedecámaras ratifica su compromiso con el diálogo social como herramienta fundamental para alcanzar la paz, pero este proceso debe acometerse en un ambiente de confianza y buena fe.
El sector empresarial representado en Fedecámaras, espera que el Gobierno rectifique su posición y así poder construir, de manera conjunta y con el apoyo de la OIT, salidas a la grave crisis del país y emprender el camino para el rescate de un país lleno de oportunidades, prosperidad y bienestar para todos los venezolanos.