La violencia hoy en día se encuentra instalada en los salones de clases y además se propaga como una epidemia sin antídoto, por lo tanto es necesario reformar la Ley Orgánica de Protección del Niño, Niña y Adolescente para poder brindar a través de mecanismos legales, seguridad y resguardo a los infantes que en este momento están expuestos a innumerables irregularidades.
Así lo manifestó la vicepresidenta de la Comisión Permanente de Familia de la Asamblea Nacional y miembro de Voluntad Popular, diputada Karín Salanova, quien indicó que la reforma legislativa es prioritaria para frenar el acoso escolar.
«Es necesario actualizar varios de sus artículos, sobre todo, se debe incluir el acoso escolar, tipificarlo e identificarlo, ya que lo más cercano para dar respuesta a ese grave problema está el artículo 32 del actual documento legal», explica.
Asimismo precisó hoy en día existen muchas interrogantes frente a la crisis de valores que vivimos en el país.
«Hay que evaluar desde diferentes perspectivas y ángulos la violencia que está en nuestra sociedad, familias y cómo ha llegado al aula escolar, a ese lugar que debe ser seguro para nuestros niños. Debemos entender que detrás de la violencia escolar hay otros detonantes que hacen que el fenómeno sea multifactorial y complejo, se tiene que establecer reglamentos que sancionen las acciones que puedan dañar a los más pequeños y vulnerables del hogar», dijo.
La parlamentaria resaltó que en todos los centros educativos de Venezuela se han reportado casos de acoso escolar y es necesario detener este tipo de actuaciones.
«Lo que comienza como un vulgar chalequeo, lastimosamente desencadena diferentes maneras violencia: peleas, maltrato, conflictos con compañeros que normalmente va en aumento hasta ocasionar daños físicos y que en el peor de los casos llega hasta la muerte, por eso la preocupación y la necesidad de establecer leyes, para disminuir los hechos violentos», sentenció.
Salanova igualmente indicó que los padres deben estar pendientes de los cambios que presenten los niños y adolescentes, «se ha denunciado con frecuencia que el patrón ejecutado es aislarse y sentir rechazo, estimulando sentimientos negativos que en ocasiones lo somatizan y se enferman».
Finalmente hizo un llamado a los representantes a estar pendientes del comportamiento de los infantes, sostener conversaciones continuas y depositar confianza para que en al momento de presentarse abusos en planteles, exista la comunicación necesaria y atacar el problema con profesionales, es por eso que la Ley tiene que estar a la altura de la situación.