Los cancilleres de Brasil y Colombia discutieron este miércoles en Brasilia estrategias de cooperación para enfrentar la llegada masiva a sus fronteras de venezolanos que huyen de la crisis alimentaria y sanitaria que golpea a su país.
«El objetivo que tenemos los dos es mantener las puertas abiertas. Ayudarles a los venezolanos que están migrando en unas circunstancias difíciles», dijo María Ángela Holguín, ministra de Relaciones Externas de Colombia, quien se encontrará por la tarde con el presidente brasileño, Michel Temer.
«Estamos viendo venezolanos en situación de hambre, en una situación de salud compleja, con muchos problemas. Eso genera un mayor reto para nuestros países», añadió en una declaración a la prensa.
La reunión incluyó a ministros de las áreas de Defensa, Justicia y Seguridad y sirvió para intercambiar experiencias del fenómeno de migración forzada que ya llevó a más de medio millón de venezolanos a instalarse en Colombia y a otros 40.000 en el estado brasileño de Roraima (norte).
«Más allá de la cooperación permanente transfronteriza entre Brasil y Colombia, tenemos una emergencia: un brote muy voluminoso de migración forzada de venezolanos en nuestros países», apuntó el canciller brasileño, Aloysio Nunes, tras la reunión.
Venezuela, una potencia petrolera regional, enfrenta una debacle financiera y política que aisló al presidente Nicolás Maduro, cuyo gobierno es catalogado de «dictadura» por Estados Unidos y Colombia.
La onda expansiva de esa crisis devino un asunto sensible para la agenda regional.
Recientemente, el Grupo de Lima, que nuclea a 14 naciones americanas, pidió a Caracas que habilite «un corredor humanitario» para ayudar a paliar el desabastecimiento de bienes y servicios vitales.
Maduro ha rechazado hasta ahora permitir esa ayuda, insistiendo en que Venezuela «no (es) un país de mendigos».
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, instó el martes a los países de la región a mantener sus puertas abiertas: «Es una contribución para la estabilidad regional y global», subrayó durante un evento en la capital brasileña.
Venezuela tendrá elecciones presidenciales el próximo 22 de abril, unos comicios a los que la oposición intenta boicotear por considerar que no existen garantías para que se desarrollen de una forma justa y libre.
«Nuestro anhelo es que Venezuela encuentre, a partir de soluciones propias de los venezolanos, la paz y la democracia con un pronunciamiento libre del pueblo en las urnas», dijo Nunes al cierre de su discurso.